Este lunes el discurso del gobernador en sus tradicionales semaneras, cambió. Con un rostro cansado y un tanto escéptico, el gobernador ofreció por primera vez, media hora de semanera, cuando su duración es normalmente de 1 hora y media o dos horas.
En casi todas, le dedicaba 1 hora al tema de la UAS y su conflicto con Héctor Melesio Cuén Ojeda. Este lunes, solo habló 7 minutos del personaje político.
Las preguntas de los periodistas estaban limitadas por instrucción de la dirección de comunicación social. Únicamente se permitirían preguntas respecto al programa de apoyos a productores con la inédita presencia del director general de SEGALMEX, Leonel Cota.
Y así fue. Sólo se prestó el micrófono a una periodista sobre ese tema. Posterior a ello, el gobernador pasó a retirarse siendo alcanzado por la prensa.
Negándose rotundamente a hablar ante la presión de los periodistas, cedió. Habló del Mayo y de Cuén pero con cara desencajada y antecediendo que “no podía hablar de nada”.
Así todo lo demás. El resto es silencio.
La fiscal pone en riesgo a testigo
Antes que Rocha diera su breve semanera, la fiscal Sara Bruna Quiñónez salió a leer un comunicado, el área de comunicación citó a la prensa en las oficinas de la Fiscalía General del Estado, pero al llegar los reporteros se les informó que no habría preguntas. Otra vez a tratar de controlar el escenario.
De todo lo que leyó la fiscal llamó la atención que diera el nombre del acompañante de Cuen Ojeda aquella noche infausta, y que hasta dijera la filiación del joven que conducía la camioneta.
Con esto la fiscal evidentemente violentó el debido proceso, reveló información confidencial de la carpeta de investigación, puso en riesgo al testigo y sobre todo, violentó los datos personales. Desde luego, no habrá sanción para esto. Ellos mandan.
El Mayo y Cuén
Muy a mediodía comenzó a circular una crónica de un periodista inglés que se dice especialista en narcotráfico y de un regiomontano, en donde exponen que Héctor Melesio Cuén Ojeda se vería con el Mayo Zambada, y que la posible causa del asesinato del líder del PAS fue que "puso" a Zambada.
Será sintomático si el gobierno y sus aliados toman esta historia al pie de la letra, sería como un tiro en el pie, porque desde hace raro que Anabel Hernández acusa a Rocha de eso mismo que hoy acusan a Cuén, con la diferencia que Cuén ya no puede defenderse. En fin. Se tenía previsto este tipo de versiones. Es Sinaloa. Es Culiacán. Es imposible evadir aquellos viejos monstruos que engendró el Estado mexicano.
