Es evidente que la convocatoria que liberó este 21 de los corrientes el Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Institucional para elegir a su dirigencia en Sinaloa se enmarca en un teatro de carpa barata y en una aparente Consulta Directa a la Base que aplicaron tarde. Es dudosa y además se le ubica en un ¿ya para qué?

Lo deja ver el delegado Ramiro Hernández cuando advierte que se buscará una fórmula de unidad. Pretende, como se maniobró desde un principio, hacer a un lado a 12 de los 14 aspirantes que se pronunciaron por ocupar el cargo, o posiblemente a todos.

Y lo reafirma la presencia de este político que representa a lo más rancio del CEN priista porque pertenece también a la granja jurásica que sumó al dinosáurico Jesús Enrique Hernández Chávez como presidente de la Comisión Estatal de Procesos Internos, sobrevivientes de las últimas hecatombes del planeta.

De éste personaje sinaloense se augura que cometerá una de sus últimas tropelías como operador, de las tantas, que a la sombra del tricolor consumó en perjuicio de verdaderos militantes.

Al igual que la apertura para el proceso, el método subsiste en la demora. Precisamente porque fueron los actos de corrupción e impunidad con que las figuras del priismo hundieron las siglas cuando ostentaron el gobierno.

En lo interno, para nombrar directivos y abanderados a puestos de elección popular la voluntad de la militancia, jamás se tomó en cuenta.

Uno de los más recientes hechos de autoritarismo se dio cuando desde el centro del país y en complicidad con el gobernante en turno Jesús Aguilar Padilla, la imposición de Jesús Vizcarra Calderón para cerrar la puerta a Mario López Valdez, desató una cruenta lucha en el estado y producto de la imposición, el segundo desde la oposición le arrebató por primera vez en la historia la gubernatura de la entidad en 2010.

Las cúpulas aprendieron la lección de este y otros casos, pero por ambición siguieron moviéndose en el fango de su círculo vicioso en que se metieron.

El ejemplo de abuso más palpable y vergonzoso es el del Alejandro Morenos Cárdenas, que a través de chapuzas, se perpetuó en su puesto como dirigente mexicano del Revolucionario Institucional, tras pisotear estatutos, leyes secundarias y a los integrantes que ya son minoría.

Todo para asegurar una candidatura y las de sus familiares y amigos para la justa comicial del 2024.

Hoy, supuestamente se intenta alentar que sea la voluntad de las bases la que coloque al nuevo Comité Directivo Estatal, acéfalo desde hace meses. Sin embargo, la primera pregunta deberá ser, si cuenta el priismo con un padrón de militantes suficiente para causar interés y parecer exitoso.

Porque al tratarse de un pleito por los despojos, se sabe que la mayoría de quienes pertenecieron a este viejo instituto, emigraron hacia Morena donde hacen filas y olas en los eventos públicos.

Asimismo cuestionar si de esa débil estructura humana que les queda, ¿cuántos están dispuestos a entrar al juego, a sabiendas de que el fraude y la simulación empuñan como un arma de la que no quieren deshacerse?

De antemano, ayer solo asistieron tres de la catorcena de pretensos que conforman la lista, entre damas y caballeros.

Información fidedigna que circula, establece que les ordenaron “apechugar” y quedarse quietos.

Más de la mitad de los suspirantes, no tienen dinero como para mover una campaña interna y los que son solventes, no resuelven todavía invertir en un PRI casi muerto.

Los que se apunten, lo harán para presionar en la intención de que los gobiernos morenistas de los distintos niveles los llamen como colaboradores. Cierto que se acercan con frecuencia, pero no tienen resultados favorables.

A esto es a lo que más le apuestan.

Por ello la rapidez de abrir el registro el 31 del mes en curso y el proselitismo a llevarse a cabo desde el 3 al 17 de junio. Para que el 20 se legitime el impulsado por el “dedazo” y al día siguiente se le entregue la constancia de mayoría.

Ambrocio en abierta campaña por Adán Augusto.

Sin pena ni gloria, el diputado local por Movimiento de Regeneración Nacional, Ambrocio Chávez, arrancó formalmente labores proselitistas en Mazatlán, en beneficio del Secretario de Gobernación, que quiere ser candidato a la Presidencia de México para el año entrante.

Abiertamente y en un reto a las autoridades electorales el legislador se creyó intocable y le pegó el síndrome del ladrillo. Se siente por las nubes y presume que puede hacer lo que le venga en gana y que nadie lo amoneste.

No sabe lo que dice, o se lanzó a “nadar como muertito”.

No está por demás acorde a la realidad, que el ex regidor del PRI y abogado Carlos Montenegro, prevea que el proceso electoral en puerta, inevitablemente se judicializará.

Expone como argumento, la desatada labor que los de Morena con posiciones públicas, se fueron a la cargada con algunos de los Presidenciables. Y no les importa violentar las reglas.

No está lejos la probabilidad de que los opositores, con los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, recuperen la silla que les quitaron con votos y que esa reintegración sea con la ley en la mano. La SCJN, dio muestras de lo que es capaz de hacer.

Ebrad avisa que pronto estará en Sinaloa.

A través de lo que se denomina Plataforma Verde, luego de inaugurar un nuevo consulado de México en Estados Unidos, particularmente en Oklahoma, que es el número 52 de toda la red diplomática, el canciller Marcelo Ebrad, único que aún no visita el estado, envió un saludo muy afectuoso a todos los sinaloenses, de los que sabe, tiene muchos seguidores para su proyecto Presidencial.

Les anticipó que pronto tocará estas tierras.

El profesor Jaime Quiñónez Múñoz, presidente de Maestros por Morena, es uno de los grandes promotores de las actividades del Secretario de Relaciones Exteriores y de las avanzadas con las que cuenta en la entidad.

Sin necesidad de recorrer este territorio, el diplomático es el que registra más bloques de apoyo que lo promueven y alcanza casi 10 agrupaciones que se integraron al calor de la precampaña.