El tamal es un famoso alimento mexicano hecho a base de maíz, relleno de diversos ingredientes, cocido en un paquete de hojas vegetales que lo mismo puede ser de maíz o de plátano. Son un platillo que se remonta a la época prehispánica de México, se dice que eran un alimento para las grandes fiestas, también se preparaban para agradecer la fertilidad de la tierra, en cualquier evento social y como ofrenda a los muertos.

Este platillo viene del vocablo “tamalli”, que significa “envuelto” en náhuatl, aunque el origen de este platillo ha sido un tema de discusión en diferentes países de Latinoamérica, siendo México el país señalado por diversos historiadores como la cuna de esta receta.

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Con el paso del tiempo este delicioso platillo ha ido adaptando y complementando su fisonomía e ingredientes, y su evolución ha sido dependiendo de la región del país, por lo que actualmente existen cientos de formas de prepararlos.

Las versiones más populares del tamal, son los tamales oaxaqueños con hoja de plátano y rellenos de mole tradicional, los Zacahuil en Huasteca Potosina, los tamales yucatecos, las corundas en Michoacán, los tamales de guisados del Noreste, los asturianos, sonorenses y sinaloenses rellenos de verduras, además de los tamales dulces. Por ello, los tamales son un clásico de la gastronomía mexicana, cuya receta seguramente continuará evolucionando y deleitando el paladar de quien los pruebe.

¿Por qué se le pone una moneda a la olla de tamales?

El utensilio que se usa para su cocción es una vaporera y en el fondo es depositada primero una cierta cantidad de agua, después una base y sobre ella los tamales. Si alguna vez has sido testigo de la preparación de los tamales, te habrás dado cuenta que quienes están encargados de su elaboración depositan dos o tres monedas en el fondo de la vaporera pero… ¿sabes cuál es su finalidad?.

En el momento en que el agua empieza a hervir, las monedas depositadas en el fondo empezarán a moverse, haciendo un golpeteo constante que indicará a los cocineros que la olla tiene la cantidad adecuada del vital líquido para que se siga produciendo el vapor y por lo tanto, los tamales tengan un buen cocimiento.

Si el agua empieza a disminuir, el ruido que hacen las monedas también se reducirá, lo que indica que hay que agregar más agua, de no hacerlo, los tamales se quemarán. Aunque parezca algo sumamente sencillo es de vital importancia llevarlo a cabo si queremos que nuestros tamales queden perfectamente bien cocidos. Con información de Arled Jarillo.

Para saber

Tamal, que proviene del náhuatl tamalli, y significa envuelto.

Cómo hacer tamales

Preparar tamales puede llegar a ser muy tardado y complejo dependiendo del tipo de tamal que hagamos, aquí te decimos cómo puedes preparar en poco tiempo unos ricos tamales.

Ingredientes

• 1 ½ kilo de masa nixtamalizada

• ¼ taza de agua

• 2 lats de verduras precocidas

• 250 gramos de manteca de cerdo

• 1 ½ taza de queso Oaxaca rallado

• 1 cucharadita de polvo para hornear

• 4 cucharaditas de sal

• Hojas de maíz o láminas de papel aluminio

Preparación

1. Agrega un poco de agua a la masa y mezcla bien hasta tener una masa suave y manejable.

2. Agrega la manteca de cerdo hasta que quede esponjosa; agrega la sal y el polvo para hornear.

3. Vierte la manteca en la masa humedecida y combina hasta tener todo bien incorporado.

4. Añade las verduras, el queso Oaxaca, mezcla bien y forma rollitos del mismo tamaño con la masa de tamal.

5. Coloca estos rollos en papel aluminio u hoja o de maíz; cierra bien los sobres para que no se salga el relleno.

6. Hierve agua en una olla/vaporera y encima acomoda los tamales, tapa la olla y cocina a fuego medio por una hora.

7. Destapa los tamales y sirve acompañados de salsa, crema y queso.