Culiacán, Sin.- La coreógrafa y directora de danza contemporánea Xitlali Piña Poujol, de la Escuela Profesional de Danza de Mazatlán del Instituto de Cultura, Turismo y Arte de Mazatlán, estará en Querétaro del 11 al 17 de noviembre para colaborar con el colectivo enNingúnlugar y compartir su conocimiento sobre el movimiento corporal como herramienta de expresión y desarrollo.
El colectivo cultural con sede en Querétaro, llamado enNingúnlugar, promueve actividades artísticas, pedagógicas y culturales orientadas a la sensibilización y la creación de comunidades cooperativas.
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Fundado por egresados de la EPDM y dirigido por Luis Rubio, el colectivo ha desarrollado Casa Verde, un centro cultural holístico que, además de ofrecer propuestas escénicas y abarca diversas disciplinas complementarias.
Rubio, por ejemplo, incorpora acupuntura en su labor, mientras que Eliana Jiménez dirige un espacio de ejercicios hipopresivos enfocados en fortalecer el suelo abdominal y pélvico.
El trabajo del colectivo se organiza bajo el sistema “Humanimal”, que utiliza herramientas psicomotoras para el desarrollo de la movilidad y es accesible a todo tipo de públicos, sin limitarse al ámbito de la danza profesional.
Buscan integrar a personas de todas las edades y niveles de condición física, fomentando el bienestar a través de una aproximación única al cuerpo y el movimiento.
Durante su estadía, Xitlali Piña impartirá un taller especializado y participará en la creación del proyecto colaborativo “El Jabalí”, en conjunto con Luis Rubio y otros miembros del colectivo.
Además, el grupo incluye a Sofía Quiroz, Humberto Vega, Anna Karen González Huesca, María Paula Pérez Yate, Daniela Yañez, Selene Flores y Catalina Rojo, quienes trabajan en la promoción de actividades culturales que impactan en la comunidad local, estatal, nacional e internacional.
Luis Rubio, quien recientemente regresó a Mazatlán para impartir un taller con la Generación XXIII de la EPDM, destacó la importancia de estas colaboraciones que fortalecen la red de creadores escénicos y contribuyen al desarrollo de una cultura inclusiva.
El acercamiento de las artes a la población con este tipo de talleres fomenta no sólo el ejercicio sino también la comunidad.