Culiacán, Sin.- Un grupo numeroso de internautas asistieron a la primera sesión del Foro Virtual Enjambre de ideas que con la premisa general “Cultura y pandemia” llevaron a cabo de manera conjunta el Instituto Municipal de Cultura Culiacán y el Seminario de Cultura Mexicana Corresponsalía Culiacán, a través de las plataformas digitales, generándose un interesante espacio de reflexión, planteamientos y propuestas no solo de los ponentes sino de quienes participaron con sus comentarios y preguntas, con el tema “Impacto y reacción de las instituciones y organismos culturales ante la crisis de la Covid-19”.
En el foro participaron los principales protagonistas y responsables de la gestión cultural tanto en la ciudad de Culiacán como en el estado: Papik Ramírez Bernal, director general del Instituto Sinaloense de Cultura; Leonor Quijada Franco, directora de la Sociedad Artística Sinaloense (SAS); Servando Rojo Quintero, director del Centro INAH Sinaloa; y Minerva Solano Moreno, directora del Instituto Municipal de Cultura Culiacán y anfitriona del evento. Por su parte, Gilberto López Alanís, quien preside la Corresponsalía Culiacán del Seminario de Cultura Mexicana, organismo coanfitrión, se encargó de presentar a cada uno de los ponentes y moderar la sesión.
Nuestra agenda cambió desde el 15 de marzo de 2020, señaló Papik Ramírez al inicio de su intervención, se pausaron importantes eventos como el Festival Cultural, mientras que otros, como la capacitación, obligaron a la inmediata migración a plataformas digitales para concluir el ciclo escolar, y destacó que con el programa ISIC desde casa, se mantuvo la conexión de los artistas con el público.
Finalmente, Ramírez Bernal señaló que ante la pandemia en el ISIC se mantienen optimistas: “Cuando superemos la nueva normalidad y volvamos a la antigua normalidad, percibiremos que la oferta cultural es más amplia a raíz de la reciente producción de los creadores que, alentados por las convocatorias y tocados por su propio impulso e ingenio, han sabido aprovechar estos dilatados días, en eso creemos en eso trabajamos desde ya”.
Por su parte, Leonor Quijada, mencionó el impacto de la pandemia en la SAS, se cancelaron importantes eventos, como el Cirque Eloize y la obra Novecento, lo que llevó a la pérdida de ingresos, patrocinios y liquidez, que derivó en la necesidad de cerrar oficinas en la ciudad de Los Mochis. Y ante la inevitabilidad de que lo único permanente es el cambio, volvieron sus ojos al mundo digital donde mantuvieron su presencia principalmente a través de cursos de apreciación de las artes escénicas y la lectura.
Hoy más que nunca, la pandemia ha dejado claros los maravillosos efectos que tienen las artes y el esparcimiento en la calidad de vida en la salud mental, en el estado de ánimo, pero también ha puesto al descubierto lo insignificante que puede ser para quienes manejan las decisiones y los presupuestos
Leonor Quijada
Con la pandemia llegaron cosas para quedarse, señala Servando Rojo: los trámites en línea, el trabajo y las reuniones en plataformas, los eventos por internet, como coloquios y foros. No se acabará lo presencial, pero habrá que combinarlos.
Asimismo, explicó en su participación, que se replanteará el espacio público como lugar de encuentro, las ciudades compactas y densas, la movilidad, la sectorización privilegiando los barrios con sus propios centros culturales y mercados. Además, la calle para los ciclistas, el peatón y la cultura; el uso necesario de la bicicleta, la vegetación en las ciudades para evitar contaminación y propagación de enfermedades.
Minerva Solano expresó que, en un verdadero instinto de conservación, en primer lugar, importaba enfocarse en el cuidado de las comunidades que dan vida y sentido al quehacer del Instituto: colaboradores, seguidores y audiencia. Adaptar la oferta cultural a las nuevas alternativas de difusión.
Este momento nos plantea, dijo, el desafío de asumir y reclamar el lugar y el papel que debe tener la cultura en la configuración de un nuevo modo de existir que defina nuestro futuro: “Quizá debemos pensar la gestión cultural que este mundo en crisis necesita, no la que este momento le condiciona; asumir la cultura como la expresión de nuestra manera de entender el mundo y darle sentido”
La directora de Cultura Culiacán concluyó su participación considerando que sea este tiempo la ocasión de asumir nuestra responsabilidad y rol de gestores culturales como agentes de transformación social.
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Encontrar en este compromiso, el gran honor de tener la voluntad de tomar mejores decisiones, enarbolar discursos que inciten el pensamiento crítico y realizar acciones que nos inviten a reconectar los lazos comunitarios, a dimensionar la importancia de los cuidados, cooperación y solidaridad.
Minerva Solano
A partir de ejercicios de reflexión como el desarrollado en el foro Enjambre de ideas, en el que las instituciones se reúnen para compartir las experiencias adquiridas, generadas por la crisis de la pandemia, surgirán dentro de poco las formas y mecanismos para hacer frente a los desafíos a través del más esencial de los principios: la cultura.
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