Adán Amezcua y Heber Gómez quieren ser inmortalizados en el Salón de la Fama del Beisbol

Ambos peloteros son leyendas de Sultanes de Monterrey, así como de Venados de Mazatlán y Tomateros de Culiacán

Isac Chávez / El Sol de Mazatlán

  · domingo 15 de septiembre de 2024

El mazatleco Adán Amezcua, espera ser inmortalizado. Foto: Cortesía / Salón de la Fama del Beisbol Mexicano

Los ex peloteros profesionales, Heber Gómez y el mazatleco Adán Amezcua, esperan ser inmortalizados dentro del Salón de la Fama del Beisbol Mexicano, entrando en la nominación de la precandidatura del 2024, luego de una larga trayectoria dentro de la pelota de verano e invierno.

Amezcua estuvo por muchos años como el receptor de los Sultanes de Monterrey, equipo con el que más se le caracterizó, pero además defendió el plato de Reynosa, San Luis, Aguascalientes, CD del Carmen, Tijuana y Yucatán, estando en 1,067 juegos en la Liga Mexicana de Beisbol, donde incluso bateó para .300 durante siete años.

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El “General” también es toda una institución de los Tomateros de Culiacán, escuadra con la que jugó 21 años, y fue parte de ese campeonato de Serie del Caribe del 2002, que obtuvieron los guindas, lo que lo llevó a ser inmortalizado en el pabellón de la fama de la Serie del Caribe en el 2021.

Heber Gómez también espera estar inmortalizado

Por su parte, el parador en corto veracruzano, pero adoptado mazatleco, Heber Gómez, también está en la terna, junto a quien fuera su compañero de equipo, Adán Amezcua, quienes le dieron alegrías a los Sultanes de Monterrey.

Gómez, aparte de vestir el uniforme de los ‘Fantasmas Grises’, defendió los colores de Tabasco y Saltillo, para dejar su porcentaje de bateo de por vida en .289, en la pelota veraniega.

En el Pacífico estuvo 19 años como pelotero activo, jugando principalmente para los Venados de Mazatlán, novena de la cual es coach de bateo, y estuvo presente en la época dorada del equipo del puerto.

“Súper Heber” como lo recuerda la afición mazatleca, dedicó 18 años de su vida con Venados, incluso siendo reconocido como el campeón bateador de la temporada 2002/2003, conectando ese año para .353, además de estar solo un año con Hermosillo.