Revisar la lista de ganadores del premio al Novato del Año es toparse con una larga fila de estrellas del pasado: Frank Robinson y el cubano Tony Oliva, Willie Mays y Johnny Bench, Willie McCovey y el puertorriqueño Orlando “Peruchín” Cepeda.
Pero también sirve para recordar la grandeza de esta generación de jugadores de Grandes Ligas: Mike Trout y Aaron Judge, Cody Bellinger y Craig Kimbrel.
Pensando en eso, decidimos armar un equipo de todos los tiempos formados por ganadores del premio al Novato del Año, basándonos sólo en las estadísticas de los jugadores en esa temporada en la que se alzaron con el galardón.
Nota: El premio fue creado en 1947, por lo que algunas grandes temporadas de novatos, como la de Ted Williams en 1939 y Joe DiMaggio en 1936, no fueron consideradas.
De cualquier forma, aquí está el Equipo de Novatos del Año.
Receptor: Mike Piazza, Dodgers, 1993
Mención honorífica: Carlton Fisk, Medias Rojas de 1972
Primero, una comparación:
Piazza: 7.0 de WAR, .932 de OPS, 35 HR, 153 de OPS
Fisk: 7.3 de WAR, .909 de OPS, 22 HR, 162 de OPS
No fue fácil, pero me decidí por Piazza por esos 13 jonrones más. Por cierto, ¿sabían que Fisk lideró la Liga Americana con nueve triples en su año de novato? Al final, éste fue el mejor tipo de dilema: Dos miembros del Salón de la Fama frente a frente.
Primera base: Jackie Robinson, Dodgers de 1947
Menciones honoríficas: Pete Alonso, Mets del 2019; Albert Pujols, Cardenales del 2001
Por buenos que hayan sido Pete Alonso y el dominicano Albert Pujols en sus respectivas campañas de novatos, no hay logro estadístico que pueda superar la temporada debut de Robinson, quien rompió la barrera del racismo mientras bateaba .297 y lideraba la Nacional con 29 bases robadas. Hizo todo al mismo tiempo que lidiaba con el peso de la historia, amenazas de muerte, soledad y constantes insultos. En ese sentido, lo que hizo no puede medirse en números. (Robinson fue primera base a tiempo completo solo en esa campaña, la de 1947, aunque jugó allí ocasionalmente a lo largo de los años.
Segunda base: Dustin Pedroia, Medias Rojas del 2007
Mención honorífica: Jim Gilliam, Dodgers de 1953
Uno de los rostros de los Medias Rojas a lo largo de una década, Dustin Pedroia fue titular en dos novenas de los Patirrojos que ganaron la Serie Mundial, incluyendo la de su temporada de novato. Ganó cuatro veces el Guante de Oro, una parte de su juego por la que nunca recibió suficiente crédito. Jim Gillian es uno de los jugadores más subestimados en la galaxia de estrellas de los Dodgers, pero fue parte importante de cuatro equipos campeones y se retiró con porcentaje de embasarse de .360 en 14 campañas.
Tercera base: Dick Allen, Filis de 1964
Mención honorífica: Kris Bryant, Cachorros del 2015
Dick Allen tuvo una de las más grandiosas temporadas ofensivas para un novato en la historia (.939 de OPS, 8.8 de WAR) y volverá a tener otra oportunidad de entrar al Salón de la Fama cuando su nombre sea analizado por un comité la próxima temporada muerta. Su WAR de 58.8 está apenas por detrás del de Vladimir Guerrero (59.5) y su OPS+ es mejor que los de Hank Aaron (155) y Joe DiMaggio (155). Kris Bryant llegó con un montón de publicidad y fue tan bueno como nos advirtieron, dejando .858 de OPS y ayudando a los Cachorros a llegar a la Serie de Campeonato de la Liga Nacional en el 2015.
Torpedero: Corey Seager, Dodgers del 2016
Mención honorífica: Hanley Ramírez, Marlins del 2006
La llegada de Seager también se produjo bajo grandes expectativas, que superó el campocorto con creces al ser Novato del Año de la Nacional y terminar tercero en la votación del JMV. El dominicano Ramírez debutó en las Mayores a los 21 años disputando dos juegos por los Medias Rojas al final de la temporada 2005 antes de ser cambiado a los Marlins y convertirse instantáneamente en una estrella en el 2006. Promedió 40 dobles y 25 jonrones por año en sus primeras cinco temporadas completas.
Jardineros: Mike Trout, Angelinos del 2012; Ichiro Suzuki, Marineros del 2001; Fred Lynn, Medias Rojas de 1975
Menciones honoríficas: Aaron Judge, Yankees del 2017; Tony Oliva, Mellizos de 1964
Ichiro Suzuki y Fred Lynn son los únicos dos jugadores que han sido Novato del Año y Jugador Más Valioso en la misma campaña, así que tenían que estar aquí. Y Trout pudo haberlos igualado también. Hubiese sido el JMV de no ser porque el venezolano Miguel Cabrera ganó la primera triple corona en 35 años. (Trout tuvo 10.5 de WAR, por 7.1 de Cabrera, y la marca de Trout es la mejor para un jugador de posición novato).
Como Trout, Judge fue segundo en la votación al JMV de la Americana (detrás del venezolano José Altuve). Oliva ganó el primero de sus tres títulos de bateo.
BD: Yordan Álvarez, Astros del 2019
Mención honorífica: Eddie Murray, Orioles de 1977
No hay muchos casos de ganadores del Novato del Año que pasaron la mayor parte del tiempo como designado, pero éstos son dos de ellos. El cubano Álvarez dejó números monstruosos en apenas 87 juegos tras su debut en junio. Su OPS+ de 173 como novato hace palidecer al de Murray (123) y le da la ventaja aquí. Murray comenzó su camino hacia Cooperstown con 110 de 152 partidos como designado en esa primera temporada. Fue el BD de los Orioles apenas 10 veces en las siguientes ocho campañas.
Lanzador abridor: Mark Fidrych, Tigres de 1976
Mención honorífica: Dwight Gooden, Mets de 1984
Cuarenta y cuatro años después, Fidrych se ha convertido en un personaje de proporciones míticas basado en una temporada de novato que se compara con la de casi cualquiera. Problemas en el brazo le pusieron fin a su carrera a los 26 años. Pero en ese año de novato hizo de 29 de sus 59 aperturas de por vida. Sus peculiaridades – hablarle a la pelota, limpiar el montículo—no deberían eclipsar la grandeza de una campaña en la que tiró 24 juegos completos e hizo 18 aperturas de dos carreras limpias o menos.
Dwight Gooden siguió a una muy buena temporada de novato con una de las mejores campañas de la historia en 1985 (24 victorias, 1.53 de efectividad, Cy Young de la Nacional).
Lanzador relevista: Craig Kimbrel, Bravos del 2011
Mención honorífica: Joe Black, Dodgers de 1952
Por momentos, Kimbrel fue casi imbateable ese año, con un promedio de 14.8 ponches por cada 9.0 innings y 46 salvados por los Bravos. Black fue un tremendo relevista antes de que el rol fuese atractivo, y esa campaña de novato fue su mejor. Terminó tercero en la votación al JMV de la Nacional esa campaña, detrás de Hank Sauer y Robin Roberts. Para que tengan una idea de cuánto ha cambiado el béisbol: Black ganó 15 juegos como relevista y tiró 142.1 entradas en 56 encuentros. Kimbrel apareció en 79 juegos y lanzó 77 capítulos.
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