Monterrey. Cuando era un joven prospecto en la academia de El Carmen, en Nuevo León, al norte del país, Roberto Osuna soñaba con que el beisbol fuera su boleto para irse fuera del país.
Ahora el beisbol lo trajo de regreso a México como el cerrador de los Astros de Houston para disputar una serie de dos partidos de temporada regular ante los Angelinos de Los Ángeles. Y en el estado donde todo comenzó.
Osuna, de 24 años, fue transferido a los Astros en julio del año pasado, luego de pasar tres campañas con los Azulejos de Toronto, pero no olvida el inicio de su carrera en su país natal.
“Estoy feliz, creo que la afición de Monterrey es quizá la mejor de todo México, ahora me dieron una foto de cuando estaba en la academia y recuerdo que la meta de todo jugador es estar en las Grandes Ligas, pero nunca pensé que las Grandes Ligas me traerían a México”, dijo el pitcher derecho.
La academia del El Carmen, localizada a unos 33 kilómetros de distancia del estadio de beisbol de Monterrey, es donde se preparan los prospectos de los equipos de la Liga Mexicana de verano y fue donde comenzó a gestarse la carrera de Osuna, quien a los 16 años debutó en el circuito con los Diablos Rojos del México, con sede en la capital.
“(Los Diablos Rojos) son la primera organización que me abrió las puertas, creo que sigo perteneciendo a ellos y me daría gusto el poder volver a compartir con ellos en el estadio, siento que le debo mucho a esa organización y quisiera volver ahora como jugador de Grandes Ligas”, agregó Osuna.
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Mientras eso sucede, Osuna podrá vivir la experiencia de lanzar en el mismo escenario donde su padre del mismo nombre jugó durante cinco temporadas como pitcher derecho de los Sultanes de Monterrey, con los que conquistó un título de la Liga Mexicana en 1991.
“He visto fotos y videos de mi papá cuando jugó aquí, así que será algo especial”, dijo Osuna. “El tener a mi papá a lado ha sido un gran impulso para mí, desde pequeño me anticipó lo que estoy viviendo”.
Osuna tuvo su mejor temporada con Toronto en 2017, cuando consiguió 39 rescates y participó en el Juego de Estrellas. Pero en 2018 aceptó una suspensión de 75 partidos por las Grandes Ligas luego de un incidente de violencia doméstica.
Aunque el derecho sabe que los aficionados locales ansían verlo en acción, Osuna prefiere no pensar mucho en ese momento.
“Mi deber es estar listo y eso es lo que voy a hacer”, añadió Osuna con siete rescates en igual número de oportunidades.
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