Culiacán, Sin. - Hace 26 años un accidente automovilístico le cambió la vida al perder a su esposa e hijo, él quedó postrado en una silla de ruedas a raíz de una lesión en la columna vertebral, pero jamás se rindió, sacó fuerzas de flaqueza, mismo que le ha permitido irse recuperando y en el softbol encontró el refugio perfecto para convertirse en un ser humano de bien para la sociedad en general.
En su vida normal, él tuvo la oportunidad de jugar futbol en la Tercera Fuerza y si bien no figuró a un gran nivel, sí tuvo la virtud de hacerlo como un entretenimiento que sirviera para contar con buena salud y ser ejemplo para las futuras generaciones.
Nos referimos a Samuel Machado Sámano, un personaje que a sus 52 años de edad --dedicado a la construcción de casas-- pese a su discapacidad, no se rindió ante la adversidad, siguió trabajando para ganarse sus pesos para satisfacer sus necesidades alimenticias, pero para fortalecerse psicológica y mentalmente, habría que recurrir a espacios deportivos donde uno se oxigena a voluntad propia.
Y más allá de todo eso, su capacidad económica le ha permitido patrocinar equipos --y fungir de manager-- como Amigos del Sammy y/o Amigos de Gokú, regresando así algo de manera generosa por esta oportunidad que el softbol le ha brindado.
Mejor conocido como el “Sammy” dentro del softbol vivió su peor pesadilla en 1993 cuando venía procedente de Tijuana, luego de un leve descanso de cuatro horas en Hermosillo, decidió continuar su viaje a esta ciudad, pero una pinchadura de una llanta trajo por consiguiente el volcamiento del automóvil, mismo que arrojó el fallecimiento de su esposa e hijo de cuatro años y él quedó en estado de coma por espacio de 12 días.
Cuando ya estuve bien de razón y que mi mamá me dijo lo de mi esposa e hijo, me deprimí bastante, pero sinceramente le dije a mi mamá, mira mamá, ya desperté, ya no me voy a morir. Lo que si me duele mucho es haber perdido a mi familia, pero si usted se imagina que voy a hacer una tontería, como querer quitarme la vida no, ya Dios me dio esta oportunidad y voy a aprovecharla.
Machado Sámano
Hace cuatro años arribó al softbol, lo vio, le gustó y en ese sentido empezó a armar equipos para buscar un entretenimiento más que le sirviera de terapia y en ese sentido estuvo en los campos que operan en Valle Alto, Liga Ernesto Millán Escalante, Nuevos Talentos, Villas del Roble (fueron campeones) y aterrizó en la Popular Libertad con Miguel A. Peñuelas Paredes.
¿Cuatro años de lleno en lo que es el softbol, te has dedicado a patrocinar y dirigir, en algo te ha servido?
Si como no, muchísimo, uno sale de la rutina, regresas a tu casa alegre, descansas a gusto, amaneces vital por todo esto que vives. El deporte es muy bonito y el que no lo valora y disfruta, pues es un tonto, esto es bien machín, la neta.
Samuel Machado Sámano
Luego de asentar que él se cataloga como una persona sincera y sin tapujos, aclaró que llegó al softbol Libertad para quedarse, “me gustó mucho este estadio, ya había recorrido varios, aquí Miguel (Peñuelas) no se inclina mucho hacia nadie. Me doy cuenta que le gusta la nivelación y sinceramente tiene todo bien ordenado y hasta rampas estoy acondicionando para batallar menos al momento de ingresar”.
Como todo ser humano, Samuel tiene sentimientos, le duelen las derrotas, pero luego le saca lo positivo, disfruta las victorias, pero, sobre todo, a cada juego se fortalece más.
¿Cómo vives los juegos Sammy?
Muy emocionado, ando de allá para acá por todas las gradas, muy nervioso. No es la misma ver desde aquí que estar allá adentro, allá es un royo y aquí otro porque desde aquí vez todas las fallas y les gritas y te desesperas. Eso sí es cierto, pero pese a los errores nunca les doy para abajo, pero sí les digo que le metan todas las ganas posibles.
Sammy
¿Entiendo que las derrotas duelen, pero los triunfos qué tal?
--Sonríe, “bien machín y bien alegre, la verdad, eso sí pues es muy bonito y la llegada de un título se saborea más distinto y vámonos a la carne asada y convivir más a fondo, no puede faltar la carnita”.
Al recordar aquel fatal año de 1993, sostuvo que el estar dormidos sus seres queridos y no molestarlos, trajo por consiguiente no se pusieran sus cinturones de seguridad (él y su cuñado sí lo hicieron) y así arrancaron sin saber qué es lo que sucedería kilómetros adelante.
No me sentí ni culpable ni nada, mi consciencia la tengo tranquila fue un accidente que me tronó una llanta y de ahí para adelante yo no supe de mí, a los 12 días desperté en el Hospital y no sabía quién era yo. Una enfermera me dijo, eres Samuel, venías de Tijuana, tuviste un accidente y ya empecé a recordar todo y empecé a preguntar por otro medio, pues no podía hablar, y me contestaban que mis familiares estaban en Culiacán, pero en realidad ellos habían fallecido al instante nada más mi cuñado y yo sobrevivimos.
Sammy
Pero Sammy los recuerda y se apoya en ellos y les da su crédito al afirmar que “a través de tanto amor que les tuve a ellos he sabido salir adelante gracias a Dios, creo que tengo un gran cerebro que no me da para abajo, como el querer agarrar la puerta falsa, y el deporte me ayuda mucho psicológicamente, y ahora mi trabajo”.
Ante eso, y haciendo un paréntesis, el Sammy hace extensivo un llamado a que los automovilistas y sus ocupantes nunca olviden ponerse el cinturón de seguridad que ayuda en mucho en casa de accidentes.
“Sinceramente, que quien se suba al carro que se ponga el cinturón, muchas veces uno no lo hace por desidia o porque se siente a gusto, pero la incomodidad muchas veces te traiciona”.
Machado Sámano sostiene que esta es una oportunidad de vida y que su recuperación es poco a poco, a través de los años, gracias a muchos amigos que ha cosechado y que ahora enfocado en el deporte está cada vez más fuerte en lo emocional.
“Qué más bonito que la vida, Dios me dio otra vida y no la voy a despreciar, ahora me enfoco más en el deporte y en mi trabajo”.
¿Gracias al softbol has ganado más amigos?
--“Si cómo no, es muy bonito porque las amistades que ganas son sanas y de lo que no queda duda es que los frutos ahí están. Amigos, triunfos que como equipo ya estamos en playoffs y vamos por más.
FRASE
“Cuando ya estuve bien de razón y que mi mamá me dijo lo de mi esposa e hijo, me deprimí bastante, pero sinceramente le dije a mi mamá, mira mamá, ya desperté, ya no me voy a morir.
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