/ lunes 26 de junio de 2023

Un pequeño árbitro con mucho talento

Iván Andrey Ochoa Obeso quiere llegar a ser como el árbitro César Ramos

Inspirado en el mundialista César Arturo Ramos Palazuelos y con muchos sueños por delante, el pequeño Iván Andrey Ochoa Obeso se abre camino en las canchas de futbol impartiendo justicia como árbitro.

Motivado por su padre del mismo nombre (árbitro), con quien comparte su preparación diaria de una a dos horas, con diversas rutinas puliendo sus conocimientos, el niño de 10 años lleva tres años haciendo “pininos” en las categorías menores, en donde es el gran atractivo para los padres de familia y otros asistentes.

Puedes leer: Sofía Guerrero Salcido: La joven skater que desafía la adrenalina y conquista medallas

Originario de la ciudad de Culiacán, desde chiquito ya tiene un gran sueño que es llegar a pitar en un mundial de futbol, siguiendo los pasos del internacional César Arturo Ramos, ya que cuenta con experiencia impartiendo justicia en los torneos de menores de las ligas locales de la capital del estado.

‘’Mi papá fue el que me dio el gusto por hacer lo que hago, porque también es árbitro, llevo tres años pitando, el futbol y mi papá es lo que me motivó para estar de juez adentro’’.

Una gran inspiración es el que tiene el jovencito Iván Ochoa, ya que su padre, es delegado de la Comisión de Arbitraje del Estado de Sinaloa, Iván Ochoa, se encarga de promover esta profesión.

‘’El niño ya suena en grande y le gustaría cumplir su mayoría de edad para poder debutar en lo que viene siendo en el futbol de primera división, así buscar el gafete FIFA y ser como uno de sus más grandes inspiradores como César Ramos, ya que cuando vio al nazareno culichi sacar una tarjeta amarilla a Cristiano Ronaldo lo motivo más’’.

El joven árbitro entrena y se esfuerza por hacer un buen papel dentro del terreno de juego, lo cual lo están puliendo mucho para que más adelante Ochoa Obeso pueda cumplir sus más grandes metas.

Iván Ochoa Obeso tenía siete años cuando debutó como juez. Foto: Kevin Chicuate | El Sol de Sinaloa


‘’Yo siempre antes de empezar me alisto para un juego en los entrenamientos, la practicas que realizo con mi papá son de gran ayuda para poder llevar un gran juego, hacemos laterales, con asistentes, marcamos fuera de juegos, saque de banda, saque de esquina’’, explica.

‘’Para entrenar siempre le dedicamos entre 1 a 2 horas de puro entrenamiento para poder pulir los detalles, uno de mis sueños a largo plazo es poder pitar unos nacionales, unos estatales para poder ir puliéndome más’’.

La Academia Omega

Generación Omega es un Colegio de Árbitros del sector aficionado que le da servicio a las diferentes ligas de futbol de Culiacán, en donde aproximadamente 50 árbitros la integran, por otro lado, Referee Kids es una escuela que pertenece a la Omega donde se trabaja con árbitros menores de edad.

Iván Andrey Ochoa Obeso, quiere seguir los pasos de su padre. Foto: Kevin Chicuate | El Sol de Sinaloa


Recuerdos

Todos los que practican un deporte o están involucrados en ellos viven demasiadas historias y para el joven árbitro no es la excepción.

’Iván se encontraba pitando su partido, su papá se encontraba en la línea para cualquier situación que se presentara para intervenir, en una acción de juego donde un niño conduce el balón cerca del área de banda, se salió el esférico del terreno, Iván (Niño) lo percibió, pero no marcó nada, siguió la jugada, y marcó un penal para el jugador, los papás del otro equipo se encontraban molestos por la situación que se le presentó y es ahí donde el papá del árbitro tuvo que entrar para poder solucionar el problema, viste que el balón abandonó el terreno de juego por la banda", me respondió si y le dijo, entonces ahí se debió terminar la jugada y debiste silbar para que el niño se detuviera, me dijo es que como el niño siguió tan emocionado, pues la dejé seguir igual le preguntó "y que tendrías que hacer entonces reglamentariamente", sin preocuparse me dijo".

El pequeño silbante tiene la edad de los 10 años y ya cuenta con un total de 6 finales en su registro, siendo puros encuentros locales, pitando así en categoría chupones, su debut fue a la edad de los 7 años, también ya pitó en un estadio profesional, siendo la sede el estadio de los Dorados, y su función fue de cuarto árbitro.

Iván Andrey Ochoa Obeso, un pequeño árbitro con mucho talento. Foto: Kevin Chicuate | El Sol de Sinaloa

‘’Tengo una buena seguridad adentro del terreno de juego, es así como me he ganado la confianza para poder pitar juegos en las finales de los torneos locales de aquí de Culiacán, estoy trabajando muy duro para poder llevar a cabo mi sueño, yo también juego futbol y me encanta, hace poco tuve la oportunidad de pitar la final de Pandas en la Liga Millán, en donde hice una buena actuación’’.

Es así como se sigue preparando día con día para hacer un buen juez en la cancha con mucho esfuerzo y mucha dedicación en donde un día se ve pitando en un mundial como lo es César Arturo Ramos que también desde pequeños inició con esta profesión.

Iván Andrey Ochoa Obeso se abre camino en las canchas de futbol impartiendo justicia como árbitro. Foto: Kevin Chicuate | El Sol de Sinaloa


Para saber

  • Las prácticas que sostiene con su papá son de gran ayuda para poder llevar un gran juego
  • 7 Años tenía Iván Ochoa Obeso cuando debutó como juez
  • 10 Años de edad tiene el pequeño con grandes sueños a futuro

Inspirado en el mundialista César Arturo Ramos Palazuelos y con muchos sueños por delante, el pequeño Iván Andrey Ochoa Obeso se abre camino en las canchas de futbol impartiendo justicia como árbitro.

Motivado por su padre del mismo nombre (árbitro), con quien comparte su preparación diaria de una a dos horas, con diversas rutinas puliendo sus conocimientos, el niño de 10 años lleva tres años haciendo “pininos” en las categorías menores, en donde es el gran atractivo para los padres de familia y otros asistentes.

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Originario de la ciudad de Culiacán, desde chiquito ya tiene un gran sueño que es llegar a pitar en un mundial de futbol, siguiendo los pasos del internacional César Arturo Ramos, ya que cuenta con experiencia impartiendo justicia en los torneos de menores de las ligas locales de la capital del estado.

‘’Mi papá fue el que me dio el gusto por hacer lo que hago, porque también es árbitro, llevo tres años pitando, el futbol y mi papá es lo que me motivó para estar de juez adentro’’.

Una gran inspiración es el que tiene el jovencito Iván Ochoa, ya que su padre, es delegado de la Comisión de Arbitraje del Estado de Sinaloa, Iván Ochoa, se encarga de promover esta profesión.

‘’El niño ya suena en grande y le gustaría cumplir su mayoría de edad para poder debutar en lo que viene siendo en el futbol de primera división, así buscar el gafete FIFA y ser como uno de sus más grandes inspiradores como César Ramos, ya que cuando vio al nazareno culichi sacar una tarjeta amarilla a Cristiano Ronaldo lo motivo más’’.

El joven árbitro entrena y se esfuerza por hacer un buen papel dentro del terreno de juego, lo cual lo están puliendo mucho para que más adelante Ochoa Obeso pueda cumplir sus más grandes metas.

Iván Ochoa Obeso tenía siete años cuando debutó como juez. Foto: Kevin Chicuate | El Sol de Sinaloa


‘’Yo siempre antes de empezar me alisto para un juego en los entrenamientos, la practicas que realizo con mi papá son de gran ayuda para poder llevar un gran juego, hacemos laterales, con asistentes, marcamos fuera de juegos, saque de banda, saque de esquina’’, explica.

‘’Para entrenar siempre le dedicamos entre 1 a 2 horas de puro entrenamiento para poder pulir los detalles, uno de mis sueños a largo plazo es poder pitar unos nacionales, unos estatales para poder ir puliéndome más’’.

La Academia Omega

Generación Omega es un Colegio de Árbitros del sector aficionado que le da servicio a las diferentes ligas de futbol de Culiacán, en donde aproximadamente 50 árbitros la integran, por otro lado, Referee Kids es una escuela que pertenece a la Omega donde se trabaja con árbitros menores de edad.

Iván Andrey Ochoa Obeso, quiere seguir los pasos de su padre. Foto: Kevin Chicuate | El Sol de Sinaloa


Recuerdos

Todos los que practican un deporte o están involucrados en ellos viven demasiadas historias y para el joven árbitro no es la excepción.

’Iván se encontraba pitando su partido, su papá se encontraba en la línea para cualquier situación que se presentara para intervenir, en una acción de juego donde un niño conduce el balón cerca del área de banda, se salió el esférico del terreno, Iván (Niño) lo percibió, pero no marcó nada, siguió la jugada, y marcó un penal para el jugador, los papás del otro equipo se encontraban molestos por la situación que se le presentó y es ahí donde el papá del árbitro tuvo que entrar para poder solucionar el problema, viste que el balón abandonó el terreno de juego por la banda", me respondió si y le dijo, entonces ahí se debió terminar la jugada y debiste silbar para que el niño se detuviera, me dijo es que como el niño siguió tan emocionado, pues la dejé seguir igual le preguntó "y que tendrías que hacer entonces reglamentariamente", sin preocuparse me dijo".

El pequeño silbante tiene la edad de los 10 años y ya cuenta con un total de 6 finales en su registro, siendo puros encuentros locales, pitando así en categoría chupones, su debut fue a la edad de los 7 años, también ya pitó en un estadio profesional, siendo la sede el estadio de los Dorados, y su función fue de cuarto árbitro.

Iván Andrey Ochoa Obeso, un pequeño árbitro con mucho talento. Foto: Kevin Chicuate | El Sol de Sinaloa

‘’Tengo una buena seguridad adentro del terreno de juego, es así como me he ganado la confianza para poder pitar juegos en las finales de los torneos locales de aquí de Culiacán, estoy trabajando muy duro para poder llevar a cabo mi sueño, yo también juego futbol y me encanta, hace poco tuve la oportunidad de pitar la final de Pandas en la Liga Millán, en donde hice una buena actuación’’.

Es así como se sigue preparando día con día para hacer un buen juez en la cancha con mucho esfuerzo y mucha dedicación en donde un día se ve pitando en un mundial como lo es César Arturo Ramos que también desde pequeños inició con esta profesión.

Iván Andrey Ochoa Obeso se abre camino en las canchas de futbol impartiendo justicia como árbitro. Foto: Kevin Chicuate | El Sol de Sinaloa


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