Como consecuencia del cambio climático, en estos últimos años las temperaturas han ido aumentando, puesto que, con la reducción de la capa de ozono, las radiaciones son más fuertes y los daños en nuestro cuerpo, especialmente en nuestra piel, son irreversibles, por lo que es de suma importancia el saber cómo debemos protegernos cuando el calentamiento global ya es una realidad, además, de que, a partir de hoy 21 de junio, entramos a la temporada de verano que es la época más calurosa del año.
De primera mano, los golpes de calor es la circunstancia más común, ya que nos exponemos por mucho tiempo al sol y sin hidratación alguna, para esto hay que saber, cuándo, cómo, cuánto, y en dónde tomar el sol, porque la exposición puede dar como resultado quemaduras a corto plazo y como largo plazo, manchas en la piel, arrugas, pérdida de elasticidad del tejido y en los peores casos, tumores de piel que pueden ser malignos.
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Alimentación correcta
En esta época es fundamental la buena alimentación hablando de frutas y beber mucha agua (como mínimo dos litros al día) y tener una dieta ligera a base de hortalizas y legumbres, además, de que los alimentos sean de ayuda para la protección de la piel, no todo se debe de dejar a las cremas protectoras, por ejemplo, el plátano, aguacate, frutos secos como nueces o almendras, también son una buena opción de consumo.
Ahora bien, después de haberse expuesto al sol, lo más recomendable es darse una ducha y aplicar suficiente crema hidratante, ya que la piel estará muy deshidratada y estresada.
DATO
Los expertos recomiendan usar cremas protectoras con niveles de protección de factor entre 30 o 50, cuando las pieles sean más cobrizas se puede utilizar un factor 30 y para las cremas más claras deben optar por 50.
