Las noches de este mes nos regalan un espectáculo celestial que ha cautivado la imaginación humana durante siglos: Las lunas de octubre. Descritas por muchos como las más hermosas del año, estas lunas llenas tienen algo especial que las hace destacar en el firmamento.
Pero, ¿cuál es el secreto detrás de su belleza? La respuesta, según la Dra. Giannina Dale Mese Zavala, especialista en astronomía de la Facultad de Ciencias de la Tierra y el Espacio (FACITE) de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), es una combinación de factores astronómicos y fenómenos psicológicos que hacen que las lunas de octubre sean verdaderamente notables.
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Uno de los factores clave que contribuyen a la belleza de las lunas de octubre es la órbita elíptica de la Luna alrededor de la Tierra. Esta órbita no es perfectamente circular, lo que significa que la distancia entre la Luna y la Tierra varía a lo largo del tiempo.
En su camino, la Luna pasa por dos puntos cruciales: el perigeo, cuando está más cerca de la Tierra, y el apogeo, cuando se encuentra más alejada. La diferencia en tamaño de la Luna entre el perigeo y el apogeo puede alcanzar hasta un asombroso 14 por ciento. Esta variación en tamaño puede contribuir a la percepción de que las lunas de octubre son particularmente impresionantes.
Idea subjetiva
Sin embargo, la Dra. Dale Mese Zavala advierte que la idea de que las lunas de octubre son las más hermosas puede ser subjetiva y no necesariamente respaldada por la ciencia. Ella señala: "¿Que se diga que las lunas de octubre son las más bonitas? Pues a lo mejor un cantante lo dice en su canción y la otra parte es porque pasan las lluvias y la primera luna llena que se puede observar en el cielo es la de octubre".
Otro fenómeno que influye en cómo percibimos la Luna es la ilusión óptica. Cuando la Luna está cerca del horizonte, ya sea al salir o ponerse, parece más grande de lo que realmente es. Esta ilusión es el resultado de factores visuales y no implica un cambio real en el tamaño de la Luna. La Doctora explica que esta ilusión puede ser comprobada tomando fotografías de la Luna en diferentes puntos de referencia.
Además de estos factores astronómicos, la llegada de la noche temprana durante octubre también juega un papel importante en nuestra percepción de la Luna. A medida que los días se vuelven más oscuros más temprano, se crea un contraste impresionante en el cielo nocturno, lo que hace que la Luna sea más visible y resplandeciente.
La fascinación por la Luna es universal, y la NASA incluso dedica un día especial para observarla. Aunque la Luna llena es la fase más conocida, los expertos prefieren realizar observaciones cuando la Luna está en cuarto creciente, ya que la luz solar se refleja en solo una fracción de su superficie, facilitando su observación a través de telescopios.
La creencia de que las lunas de octubre son las más hermosas puede ser el resultado de una combinación de factores astronómicos y percepciones humanas. Estos secretos de las lunas de octubre nos recuerdan que la belleza de este satélite natural es tanto un misterio como un regalo de la naturaleza que continúa asombrando a personas de todas las edades y culturas a lo largo de la historia.