Mazatlán, Sinaloa.- Durante más de siete años, Luis e Isabel intentaron concebir un hijo sin éxito, conforme el tiempo pasaba el dolor, cansancio y decepción se acumulaban en su matrimonio, pues lo único que deseaban era ser papás, fue entonces cuando una prima cercana que trabajaba en el Sistema DIF en Culiacán, les sugirió otra alternativa, una poco convencional, la adopción.
Aunque esa idea ya venía haciendo eco en sus cabezas, jamás se lo habían planteado como una posibilidad, y además esa era su última opción, fue entonces que después de su larga lucha decidieron postularse, no sin antes someterse a terapia psicológica, pues no querían tomar una decisión de la que no pudieran hacerse cargo.
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“Es algo desgastante para la pareja el estar intentando e intentando, además cuando oyes la palabra adopción o inclinarte a adoptar, como que la gente le tenemos miedo, como que no sabemos lo que pueda pasar, más allá de ahí; ya que empieza el proceso, como que es algo que verdaderamente tienes que agarrar una terapia, no es algo que se tome a la ligera”.
Recordó como fue el estar haciendo el papeleo, temían ya que habían escuchado de personas que duraron años en la lista de espera. Después de ir y venir, les asignaron un pequeñito de unos seis a siete meses, al principio las visitas eran cada jueves, una hora por la mañana, conformen pasaban las pruebas, aumentaron a poder pasar 24 horas con él fuera del albergue.
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“Ellos tienen que ver que el niño o bebé este con una buena familia. Tú te tienes que ganar el cariño del niño o de la niña. Nosotros cuando estábamos con el proceso, cuando lo dejábamos ya en la noche, pues nos dolía bastante, ya estábamos encariñados con el niño y teníamos cierto miedo que por algún motivo el niño no quedará con nosotros, pero gracias a Dios se dio”.
Recomendó a todas esas parejas que están allá afuera intentándolo, que consideren adoptar, ya que es una oportunidad única donde no sólo se benefician como matrimonio, también le brindan la oportunidad a un pequeñito de vivir en un hogar con amor, además, el tiempo y la edad es clave para llevar a cabo estos procesos; esa frase que dice “Si no es de tu sangre, no lo quieres igual”, son tonterías, dijo.
PANORAMA
En Mazatlán, hay más de 60 niños entre los 0 y 12 años de edad, que están a la espera de una segunda oportunidad para reintegrarse a una familia, que les brinde una vida digna, sin carencias, libre de violencia y llena de amor, respeto y valores. Sólo hay una cosa que los mantiene en los albergues, y es el largo proceso y requerimientos que se necesitan, y la falta de cultura alrededor de la adopción.
Roberto Rodríguez Lizárraga, director del Sistema DIF Mazatlán, explicó que la adopción es una actuación jurídica mediante la que una persona mayor de edad asume la responsabilidad y los derechos y obligaciones de uno o más menores con o sin discapacidad.
“El tiempo estimado de una adopción, es de aproximadamente un año a un año y medio, y esto varía con base a los estudios psicológicos que se hacen, porque tienen vencimiento, y si la persona no está apta para una adopción se detecta la problemática o la patología para que lo resuelva, y posteriormente nosotros volvemos a recibirlos. Hay personas que no pueden adoptar niños, de acuerdo a la patología”.
Los exámenes psicológicos, subrayó, son la principal causa de que un proceso de adopción se vea lento y poco ágil, además los familiares cercanos al menor, del cual los progenitores perdieron su patria potestad al poner en riesgo la vida o abandonarlo por más de tres meses, son los que tienen prioridad sobre cualquier persona; aquellos sin parentesco, son los últimos en la lista para poder conseguir con éxito adoptar.
En lo que va de la actual administración, hay aproximadamente 55 parejas que están buscando adoptar un menor, sin embargo, hasta el momento ninguna lo ha conseguido debido a que todos los procesos iniciados con la administración anterior fueron iniciados desde cero, por seguridad y porque se realicen los debidos procesos.
En México, la única entidad autorizada que puede interceder en una adopción es el Sistema del Desarrollo Integral de la Familia, la cual es el ente que aplica múltiples estudios psicológicos y económicos a parejas heterosexuales y mayores de 25 años, así como vigila y canaliza los primeros encuentros, donde tanto el niño como la pareja deben sentirse cómodos el uno con el otro.
LEGALIDAD
José Antonio Serna, Presidente del Colegio de Abogados Marco Antonio Arroyo Camberos, declaró que en México existen diversos tipos de familia que las leyes sinaloenses dejan de lado, como es el caso de la monoparental u homoparental, las cuales deberían tener derecho a la adopción al igual que la nuclear, ya que al final de cuentas el derecho que se busca proteger con este proceso es el del menor, el cual merece crecer con amor y en mejores condiciones.
“Indiscutiblemente es retrógrada la Ley como está aquí, y también la autoridad que todavía no supera esa cuestión en aras de la equidad de género, la igualdad, e incluso en una democracia, ya la corte ya falló, ya declaró ilegales todas esas leyes que son anticonstitucionales, e inclusive ya se vio que desde luego si tienen derecho para adoptar un matrimonio del mismo género incluso, si alguna autoridad los restringe o discrimina a alguien, tiene la vía de amparo”.
Explicó que constitucionalmente hablando ya se interpretó la ley y hay jurisprudencia al respecto, donde se señala que es anticonstitucional, por lo que una familia homoparental podría acudir a un amparo, pues la sociedad va cambiando y el derecho se amolda a la necesidad de esta, pues su principal objetivo es facilitarle al ser humano el ser feliz.
“¿Qué es peor un niño sin familia o un niño al seno de una familia que sea del mismo género? Creemos que es peor el niño abandonado a uno que sea adoptado, y esté bajo el resguardo de esa familia, ya que disminuirían los niños en las calles, sin hogar, sin amparo”.
Aseguró que hay numerosos casos donde aquellos niños que crecen rodeados de violencia, abandono y falta de valores, son los más propensos a delinquir en el futuro, por lo que es tarea de todos como sociedad deshacerse de los prejuicios y apoyar que los pequeños siempre crezcan en un hogar con el amor, sea como sea la familia.
¿QUÉ NECESITAN?
Para conocer más acerca de los requisitos para postularse y comenzar el proceso de adopción, puede consultarlo en sitios.dif.gob.mx/transparencia/transparencia_focalizada/adopciones/ o directamente a las oficinas del Sistema DIF en el interior del Palacio Federal.
DATOS
México ocupa el segundo lugar en América Latina en cantidad de niños huérfanos.
De acuerdo al INEGI, en México hay más de 30 mil niños que viven en orfanatos, pero no todos son susceptibles de ser adoptados, porque su situación jurídica no lo permite.
La edad máxima que las familias están dispuestas a aceptar para adoptar a un menor es de ocho años.
De acuerdo al DIF, desde el 2012 hasta 2016, ningún niño mayor de 11 años logró integrarse a una familia.
Cuando se trata de buscar un candidato para un nuevo hogar, los niños mayores, con discapacidad y con hermanos, llevan las de perder frente a los más pequeños.
En México existen 753 casas hogar, distribuidas en todo el territorio.