Culiacán, Sin.- Un hombre de 27 años de edad, denunció a El Sol de Sinaloa que sufrió discriminación esta semana, cuando se le negó realizar sus actividades esenciales como ir al supermercado, comer después del trabajo en un restaurante y también entrar al cine.
El psicólogo, quien pidió anonimato, tiene una capacidad motriz que le impide caminar sin tener soporte. Fue por el nuevo protocolo de bioseguridad emitido por el Ayuntamiento de Culiacán para mitigar los contagios del Covid-19, que el psicólogo ya no pudo surtir al menos sus víveres.
Es el inciso H, que dicta que: “deberá prohibirse el acceso a establecimientos a personas discapacitadas, menores de 12 años, mujeres embarazadas y adultos mayores de 70 años, o bien a quienes padezcan diabetes, cáncer o cualquier otra enfermedad contagiosa”.
“Yo trabajo todo el día, mis horarios desde muy temprano hasta muy tarde, yo me veo en la necesidad de ir a un restaurante en la hora que me dan de comida y hace un par de días no se me permitió el acceso. Fui a otro y me dijeron que no iban a dejar pasar a personas con discapacidad, yo les dije que mi discapacidad era motriz y esto no me hacía más vulnerable al virus”, dijo, el hombre.
La maestrante en derechos humanos por la Universidad Iberoamericana, Edith Robles Arredondo, señaló que lo expresado en este apartado, está afectando el derecho del desarrollo de la persona.
“Definitivamente es una discriminación no positiva, cuando hablamos de derechos humanos, se necesita realizar acciones positivas, o bien discriminaciones positivas, estrategias diferenciadas para favorecer la inclusión de las personas con una discapacidad motriz o visual. En este caso es muy importante el tema de la prevención de la salud por la pandemia, y hay estrategias que son prioritarias para mitigar los contagios sobre todo en las personas con vulnerabilidad, sin embargo, considero un error el uso del término discapacidad en este apartado”, expuso.
El afectado pidió que se considere el cambio a este inciso, pues destacó que la normativa está muy ambigua, y las personas que ponen en práctica el protocolo deben ser un poco más conscientes en su manera de comunicarse con las personas.
Por su parte la abogada Martha Elena Santos Arroyo, presidenta del Consejo Nacional Gente Pequeña, defendió que el inciso H de este protocolo sí busca la protección de personas que son vulnerables al virus, sin embargo, hay acciones que se deben tomar en cuenta con esta decisión, pues no todas las personas con discapacidad cuentan con una red de apoya.
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“A la lectura quizá muchas personas podrán considerar que es discriminatorio prohibir el acceso a las personas con discapacidad, sin embargo, en nuestro gremio y en el de las personas usuarias de silla de ruedas, comentábamos que estábamos de acuerdo con esta medida pero que sí necesitamos una acción paralela a este protocolo, en virtud de, que existen muchas personas con discapacidad que vivimos solas, podemos muchas personas con discapacidad que vivimos con un compañero”, declaró Santos Arroyo.
Mencionó que, una de las acciones paralelas a implementar con este comunicado, es invitar a la población a acudir a algún área del ayuntamiento por teléfono, WhatsApp o internet, para que puedan decir: “yo soy una persona con discapacidad que vivo sola o con otra persona que está también en estado de vulnerabilidad, y al restringirnos el acceso a un supermercado y yo sin tener redes de apoyo ¿quién me va a traer los alimentos?”.
SIN RESPUESTA
El Sol de Sinaloa buscó al alcalde Jesús Estrada Ferreiro, para cuestionarle, sin embargo no respondió las llamadas y mensajes.
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