Culiacán, Sin.- En el único macrocentro de vacunación que hay en Culiacán para la aplicación de la primera y segunda dosis de AstraZeneca, los ciudadanos tienen que hacer fila por hasta dos horas y media para poder ingresar, provocando que algunos adultos mayores se desmayen.
A pesar de que los “abuelitos”, mujeres embarazadas y personas discapacitadas pueden ingresar de manera rápida, algunos adultos mayores desconocen esta medida y se forman en la larga fila sin una protección contra los rayos del sol.
La ciudadana Alma, de 43 años, quien acudió por su segunda dosis, fue testigo de cómo dos adultos mayores se desvanecieron por el calor y la falta de alimento, en lo que esperan recibir su dosis contra el coronavirus.
Fue con el auxilio de las mismas personas de la fila como se cuidó que un señor no se lastimara, mientras que otro ciudadano pidió ayuda a los brigadistas y minutos después una ambulancia acudió para su atención. Finalmente, fueron trasladados por los paramédicos.
En su caso, llegó a las 8:30 horas y salió hasta las 12:00 horas, cuando pensaba que la atención iba a ser igual de rápida que cuando tuvo su primera dosis.
Para Brenda, de 38 años, que acudía para su segunda dosis, considera que en el centro de vacunación hay un descontrol en el exterior y es cuando ingresan que el proceso fluye con mayor rapidez.
A las 9:00 horas llegó al cuartel militar con la idea de que iba ser vacunada rápido y hasta las 12:00 horas salió ya con su segunda dosis.
La opinión general de las personas es que se deben de abrir más centros de vacunación para que se respete la sana distancia, ya que, con la demanda que se está teniendo es imposible que las personas estén a dos metros de distancia.
En esta ocasión, elementos de Protección Civil municipal se sumaron a los brigadistas, quienes contemplan que se apliquen 25 mil vacunas en el primer día.
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En el lugar, hay varios puestos de aguas frescas y botanas para las personas que con un paraguas, sombrero o sin nada, se quedan por horas expuestos a los rayos del sol.
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