Mazatlán, Sin.- Organizaciones no gubernamentales, académicos y ambientalistas de Sinaloa se oponen a la construcción y operación de la planta de fertilizantes en la Bahía de Ohuira, Ahome.
El rechazo a este proyecto se debe a los impactos ecológicos, sociales y económicos que esta planta ocasionará al entrar en funciones.
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La empresa Gas y Petroquímica de Occidente (GPO) emprendió en Topolobampo hace nueve años el proyecto para producir amoniaco. La intención es asentarse sobre la Bahía de Ohuira, perteneciente al complejo lagunar Santa María-Topolobampo-Ohuira, única entre las lagunas costeras del estado de Sinaloa.
Las autoridades afirman que la construcción de esta planta de fertilizantes es clave para la producción agrícola, ya que en este momento no se produce esa materia prima en México.
Daño ecológico
El ambientalista Jaime Renán Ramirez Verduzco señaló que es preocupante al tratarse de un proyecto que no suma, en el que no salen las cuentas, aún pensando en la misma lógica del desarrollo de los agentes económicos.
"Se habla de que esta planta va a generar 150 empleos permanentes y hay en este momento alrededor de tres mil pescadores, los cuales se van a ver directamente afectados por los desechos que la planta arrojará al cuerpo de agua; aumentará la salinidad, habrá impactos acumulativos en cinco años y a mediano plazo esas tres mil familias no van a tener modo de subsistir", señaló.
Enfatizó que este sistema lagunar tiene mucho manglar en la parte de Santa María y Topolobampo, en total 11 mil hectáreas. Mientras que en la parte de Ohuira hay pastos marinos que sirven de vivero a muchas especies en etapa larval y primeros días de vida, como camarones, jaibas y variedad de peces; también es un refugio para tortugas.
"Nos preocupa mucho que un gobierno que se supone que tiene sentido social esté apoyando a una empresa con capital extranjero, aliado con los grandes capitales del norte de Sinaloa, para acabar con el sustento de tres mil familias", enfatizó.
Afectación a las comunidades indígenas
Arturo Cazares, representante del Consejo Nacional Legítimo de Pueblos Originarios y Comunidades Indígenas, indicó que a pesar de que prometen empleos, no es seguro que los vayan a contratar y en cambio entrarán otros que estén preparados para el manejo de la maquinaria, por lo que los habitantes de esa zona tendrán que emigrar a otros lugares.
Precisó que no se oponen al progreso, pero sí a que se haga por encima del bienestar de la gente, ya que la mayoría de los habitantes vive de la bahía.
"Que el gobierno reconsidere su posición de proteger las inversiones sobre la vida. No les importa lo que pase con las comunidades indígenas, será un éxodo inminente", precisó.
Por su parte, Gustavo Leal, representante del Consejo Nacional de Indígenas Mexicanos y Afromexicanos, refrendó su posicionamiento con un rotundo no, al atentar contra los recursos humanos, la flora y fauna y la fuente de trabajo de los indígenas.
Agregó que ha existido "mano negra" de los exgobernantes del estado para que este proyecto avance y lamentó que la corrupción de la política haya llegado hasta los indígenas.
"Estamos en contra de esos atropellos, lamentablemente, el político va con dádivas con el indígena y le da una colcha, una despensa y con eso se lo gana", lamentó.
Exhortó también a los legisladores, diputados locales y federales a no "nadar de muertito" y que no se queden sin hacer ni decir nada.
¿Y la política de la cuarta transformación?
David Ocampo Peraza, presidente del Centro para la Educación Agrícola y Ambiental, dijo que a pesar de los amparos y juicios que se han elaborado en contra de la planta, la autoridad correspondiente revierte y autoriza.
"Hacer un llamado a nuestro presidente, Andrés Manuel López Obrador, al gobernador Rubén Rocha Moya y a todo aquel ciudadano que tenga un poco de conciencia sobre la importancia de no construir esa gran fábrica de fertilizantes en un sistema lagunar, mencionando en repetidas ocasiones, es un área natural protegida a nivel internacional", dijo.
El ambientalista se preguntó en dónde quedó la política de la Cuarta Transformación que se ha venido pregonando y de los estatutos del propio partido Morena, los cuales indican que se debe proteger el territorio nacional, impulsar la industria nacional y cuidar los recursos de saqueos.
Manifestación
Ante tal situación, convocan a un plantón-manifestación el próximo sábado 23 de julio en el Monumento a la Familia y letras de Mazatlán.
La protesta se realizará de forma simultánea en el norte y centro del estado. Ahí informarán a la ciudadanía la importancia de cuidar y defender los recursos naturales y a los pueblos indígenas.
