Culiacán, Sin.- Cientos de arreglos florales y veladoras adornan la capilla de Jesús Malverde, también conocido como el Bandido Generoso, hoy 3 de mayo, en el aniversario 114 de su muerte.
Ubicada sobre la avenida Independencia, la Capilla de Jesús Malverde se ha convertido en un centro ceremonial donde miles de personas de todo el estado y el resto de la República se dieron cita para venerar y celebrar la vida del Bandido del Pueblo.
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Jesús Malverde Campos es recordado por ayudar y entregar dinero a los más necesitados, dinero que obtenía de asaltar camiones y robar a los ricos. El bandido es considerado como un santo, muchas personas encienden veladoras en su nombre y se encomiendan a él cuando pasan situaciones difíciles.
Este 3 de mayo sus fieles acudieron al santuario como pago de una manda o para dar gracias por algún favor, milagro o mantenerlos con vida y salud a ellos y sus familias.
Desde el sur del país, de los estados de Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Estado de México cientos de familias llegaron a la capital sinaloense para ser parte del festejo que reúne a miles de creyentes, también se observó la visita de personas del norte de la República, como Nuevo León, Durango y Tamaulipas.
Cumplió su manda
Es el caso de Alejandro Agustín, quien desde hace un año se convirtió en creyente de Malverde luego de encomendar la vida de su hija cuando se encontraba en grave estado de salud.
Alejandro viajó desde Apodaca, Monterrey para pagar una manda, al no conocer a nadie en Culiacán ni contar con recursos para hospedarse en un hotel, pasó la noche en el interior de la capilla, como otra decena de personas que viajaron desde lejos.
“Vengo a pagar una manda, mi hija estaba muy enferma y me encomendé a él, ahora vengo solo pero el otro año si traigo a mi familia, está muy bonito el ambiente”, expresó.
Fiesta tradicional
Los festejos del aniversario 114 de Malverde comenzaron en la tarde de ayer y concluirán mañana en la madrugada, hace unas horas se realizó una procesión en las calles aledañas a la capilla como muestra de veneración y respeto.
El evento se desarrolla en un ambiente familiar, de culto, música, baile y alegría, se encuentran niños, jóvenes, adultos mayores e incluso personas con maletas que vienen de otros estados de la República exclusivamente a la capilla de Malverde.