Culiacán, Sin.- Un aroma a tamales y atole invadió Quilá, una sindicatura al sur de Culiacán, donde anualmente los pobladores se organizan para celebrar en grande el Día de la Candelaria.

El festejo comenzó con el arribo de feligreses a la parroquia de la santa patrona, donde se ofreció un sermón conmemorativo para esta fecha.

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Posteriormente, los asistentes se trasladaron a la Casa de la Cultura para disfrutar del tradicional desayuno. Los platillos principales fueron los tamales de puerco, aunque también hubo de elote. Además, los visitantes y pobladores disfrutaron de atole y el tradicional pan de nata.

Durante el sermón del padre, se destacó que esta celebración tiene una antigüedad superior a los 400 años. Se realiza 40 días después de Navidad y del nacimiento de Jesús, conmemorando el momento en que la Virgen de Guadalupe acudió a la iglesia para ser purificada después de dar a luz a Jesús. En cuanto al origen del nombre de la festividad, el sacerdote explicó que la Virgen llevó candelas para ser bendecidas.

Las actividades en Quilá por el Día de la Candelaria continuarán esta tarde. Se instaló una feria en la explanada de la iglesia, donde niños y adultos podrán disfrutar de comida y juegos mecánicos