Culiacán, Sin.- Rubén Sáenz "El Profe", ingresó a las filas de la benemérita institución con tan sólo 15 años de edad, a dos años de comenzar la década de los 60´s.
Recuerda que la estación se encontraba en la esquina de José Mariano Matamoros (hoy Miguel Hidalgo) y Obregón, a un costado de Catedral, en el centro de Culiacán.
EL CASO
Era una tarde de verano del 58 cuando les informaron de un cuerpo encontrado en las aguas del Canal que comunica a la sindicatura de Costa Rica. La ambulancia partió en dirección al sur de la capital sinaloense, de prisa y rompiendo el clima cálido.
Al llegar, observaron el cuerpo de una mujer flotando en las aguas turbias. El jefe de servicios indicó fuera Rubén quien entrara al rescate del cuerpo, y este sin pensarlo se arrojó a la corriente del canal.
Al aproximarse, se podía respirar un fuerte hedor a carne podrida, el joven quinceañero pudo ver como la piel de la mujer, que tendría al menos seis días de fallecida, ya se comenzaba a desprender de sus músculos, así mismo la hinchazón no permitía reconocer su rostro.
Una capa de grasa cubría la superficie, por lo que mover el cuerpo para llevarlo hasta la orilla se hacía difícil; después de algunos minutos de lucha, Rubén logró poner el cadáver en el pasto fuera del canal.
Transportar el cuerpo se hacía difícil por la falta de insumos y el material necesario: las camillas eran de lonas y las ambulancias no contaban con aire acondicionado.
EL TRASLADO
El regreso a la ciudad se hacía eterno. “El Profe” viajaba al lado del cadáver que desprendía ese olor fétido. Su destino final era el Anfiteatro del Hospital Civil, ya que, en aquel tiempo no se tenía el Servicio Médico Forense.
Al despedirse del cadáver, Rubén no supo más de ella, ni las causas de la muerte, ni si esta había sido dada a sus familiares para la santa sepultura.
Habían transcurrido tres días, en los que el joven asistía a sus clases de secundaria y no había probado bocado, pues, dice el olor hediondo seguía dentro de sus fosas nasales. Del tema no se habló con nadie fuera del grupo de rescatistas que acudieron al sitio, pues nadie quiere recordar lo vivido en los servicios.
PERFIL
Rubén Sáenz, “El Profe” forma parte de Cruz Roja hace 63 años, en los cuales ha vivido un sinfín de experiencias, tanto en los servicios como en la dirección regional y actualmente en Veteranos.
En 1972, por su desempeño en la institución, fue nombrado comandante.
Para 1995 fue nombrado Jefe Regional, y posteriormente tomó posición como Director General de las escuelas de paramédicos en Cruz Roja.
En 2014 fundó el grupo de veteranos, siendo el primer coordinador y que hasta la fecha está en función.
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La pandemia de Covid-19 los obligó a aislarse en casa, y desde ahí han impartido cursos para sus compañeros, así como dar terapias a pacientes sobrevivientes de coronavirus y desde la tanatología, como apoyo para superar el duelo por la pérdida de algún ser querido.
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