Culiacán, Sin.- Las fuentes de aguas negras que desembocan en el río Tamazula a la altura de la isla de Orabá, podría convertirse en una contingencia grave ambiental que derive problemas de salud para la ciudadanía de Culiacán, reconoció el gerente general de la Junta de Agua Potable y Alcantarillado, Jesús Higuera Laura.
El representante de Japac informó que esta problemática se originó luego del colapso del emisor Rubí, el cuál tiene más de 60 años de antigüedad
"Tenemos un problema de un colapso en el emisor Rubí, ahí saliendo del malecón rumbo al ferrocarril, eso está provocando derrame de aguas negras en el río Tamazula, eso está generando la posibilidad de una contingencia grave ambiental, problemas serios a la salud y a la gente de Culiacán, estamos obligados a hacer algo", manifestó.
Higuera Laura comentó que el alcalde Jesús Estrada Ferreiro ya se encuentra gestionando recursos para la reparación de este emisor, pues añadió hacen falta 20 millones de pesos para ello.
Ahí mismo indicó que la reparación de esta problemática podría derivar molestias en el tránsito vehicular por lo menos dos meses en la ciudad.
"La solución aparte de los más de 20 millones de pesos que se requieren, va a generar muchas molestias al tránsito vehicular del malecón por al menos en unos dos meses". Expresó
También puedes leer: Brotan aguas negras en la isla de Orabá
El funcionario puntualizó que el año pasado se invirtieron más de 60 millones de pesos en la reparación en el tramo de un kilómetro y medio.
Lee más aquí: