Escuinapa.- El mes de diciembre para muchos es sinónimo de fiesta y alegría, mientras que para otros representa trabajo y buenos dividendos económicos.
Este es el caso de Ana Isabel Contreras, una mujer que encontró en la elaboración de piñatas y adornos navideños su forma de vida.
Aunque no recuerda la fecha exacta en la que se inició en esta labor, relata que las primeras piñatas las creó para los festejos familiares. Al darse cuenta que podía vivir de eso se dedicó por completo a la actividad.
Bien recuerdo que las primeras piñatas que hice fueron para la familia, dicen que echando a perder se aprende, y así fue como inicié yo, me quedaban muy duras, pero poco a poco fuimos mejorando en los productos.
Contreras
Conforme su trabajo fue mejorando, las ofreció a los vecinos y personas conocidas. Poco a poco y con precios muy accesibles para los escuinapenses, convirtió este trabajo en su sustento.
Su casa, la cual se encuentra ubicada en la colonia Pueblo Nuevo, se convirtió en el taller. Apoyada por toda su familia y entre cartón, papel periódico y engrudo, atiende a la clientela.
Cuando están libres todos se ponen a ayudarme, unos con las tijeras a cortar papel, otros a pegar con el engrudo, en lo que se pueda, pero a todos los pongo a trabajar.
Contreras
La venta de las piñatas las realiza todo el año, pero la mejor temporada resulta ser la decembrina por la celebración de las posadas.
"Todo el año vendemos, para los cumpleaños principalmente, pero el mejor tiempo para la venta es ahora en diciembre para las posadas, las que más nos piden son las de estrella, tan sólo ahorita ya tenemos pedidas más de cien, la gente viene con tiempo a pedirlas y ya se las apartamos".
Externó que además del recurso económico que le deja elaborar y vender piñatas, le satisface saber que su trabajo es parte de un momento de alegría de las familias escuinapenses.
Muchas personas dejaron de ir a Mazatlán a comprarlas. En un principio para apoyarla y luego porque se dieron cuenta que el trabajo es de calidad y a un precio muy accesible. Ahora, ella es quien surte a los escuinapenses cada temporada de posadas o en las fiestas infantiles de todo el año.
PRECIOS
Ana Isabel vende las piñatas de acuerdo a su tamaño. Desde 150 pesos las chicas, hasta 350 pesos las más grandes.
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