Culiacán, Sin.- En la bodega de maquinaria del ayuntamiento, ubicada en la colonia 21 de Marzo, resalta un cúmulo de figuras humanoides blancas, al hacercarse se logra divisar con más claridad al rededor de 30 Morrines amontonados en una de las esquinas del recinto.

El tiempo no perdonó a uno de los protagonistas de la campaña "Al 100 por Culiacán", lanzada durante el mandato de Sergio Torres como alcalde de la capital sinaloense, en 2015.

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Asimismo, se aprecia como algunos tienen marcas de vandalismo, así como tierra y un panal de abejas.

Por otro lado, también se logra mirar como algunos conservan su emboltorio de plástico, a la espera de ser colocados, sin embargo, desde hace tiempo que los morrines se alejaron de las calles de la capital, y no se avisora un pronto retorno.

Una mancha del pasado

Cuando los Morrines se adueñaron de las calles de la capital en el 2016, las críticas no pararon de caer sobre la administración de Sergio Torres.

Lo que parecía una buena idea, rápidamente se convirtió en descontento por parte de la población, quien catálogo a la campaña de inepta en cumplir su objetivo de inculcar valores a los niños.

Tras ser colocados en puntos claves de la ciudad, las figuras no tardaron en ser víctimas del vandalismo, e incluso algunos fueron usurpados. Esto dejo una mancha valuada en 162 mil pesos, que fue el costo de la campaña.

El impacto se acrecentó debido a que en el año anterior a los Morrines, en el 2014, el ayuntamiento también invirtió en 40 arbolitos luminosos que se instalaron por la ciudad, con una inversión de 19 mil 400 pesos por cada uno y un total de un millón 164 mil pesos.