Culiacán, Sin. -Con el grito de “sí al presupuesto” inició la sesión ordinaria del Congreso del estado con una hora de retraso y a los quince minutos se suspendió debido a que pese a que estaba agendada el acta de la sesión anterior no la tenían y el presidente de la mesa directiva, Marco César Amaral pretendía que ésta la aprobara el pleno sin siquiera conocerla, por lo que se dio un receso para redactar la mencionada acta.

Entre maletas, cobijas, zapatos diseminados por los pasillos del Congreso, ropa tirada y casas de campaña de los integrantes de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas que desde una noche anterior tomaron el Congreso del Estado, otros manifestantes brincando todo obstáculo, ingresaron al recinto parlamentario para manifestarse en contra “de diputados traidores”.

Maestros de Somos Más que 53, integrantes del Frente Democrático "Maestra Herlinda Barrera", pertenecientes al SNTE 27 y trabajadores de la salud con consignas en contra de diputados del PRI y algunos de Morena no permitían que la sesión se desarrollara ¡fuera los traidores! gritaban.

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Los manifestantes apoyaban con pancartas y gritos a algunos diputados de Morena en la reasignación de mil 600 millones de pesos y exigieron que se respete la reasignación de 900 millones al presupuesto, además demandaron que el gobernador publique el dictamen del presupuesto aprobado en el Periódico Oficial.

El mayor repudio fue para la presidenta de la Comisión de Hacienda y diputada de Morena Victoria Sánchez, quien no estuvo presente, pero aun así la calificaron de corrupta.

Con un lleno total los asistentes no se cansaron de abuchear a la bancada del PRI y al diputado de Morena, Fernando Mascareño y al del PT, Mario González a quienes los llamaron “traidores a la patria”.

Al iniciar la sesión la diputada del PRI Gloria Himelda Félix en tribuna solicitó que se anexara un pronunciamiento relacionado al voto de la sesión anterior para que se integrara en el acta de esa sesión, sin embargo, su posicionamiento no fue escuchado debido a los gritos de ¡fuera…fuera…! y algunos ademanes que le hacían los maestros desde las gradas y que la misma diputada los desestimó: “nombre…son movimientos sexis” y admitió que todas las descalificaciones que sesión tras sesión le lanzan los seguidores de Morena “ya se me resbalan como teflón”.

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Después el presidente de la Mesa Directiva ponía a votación un acta que no aparecía por ningún lado, lo que motivó que el diputado Jorge Iván Villalobos, coordinador de la bancada del PAN, los exhibiera al cuestionar al legislador Marco César Almaral cómo pedía que se votara cuando los diputados no contaban con una copia del acta de la sesión anterior, por lo que se declaró un receso de diez minutos que se prolongó por casi dos horas.

¡Tuvieron una semana y todavía no está lista…” cuestionaba el coordinador de los priistas, Sergio Jacobo!

Lo que llamaba la atención fue la ausencia de los miembros de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas –UNTA-, no estuvieran en la sesión pese a que desde la noche del lunes bloquearon los accesos del Congreso.

Se mantuvieron al margen de las protestas, sólo las mantas daban cuenta de su inconformidad.

Y así como a los maestros y trabajadores del sector salud, fueron atendidos por legisladores, los trabajadores del campo también tuvieron un trato “especial”, al ser recibidos por la presidenta de la Junta de Coordinación Política, Graciela Domínguez y un grupo de diputados de Morena.

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Después de ser escuchados, tanto diputados como dirigentes de la UNTA firmaron una minuta donde se establece el compromiso de realizar gestiones de vivienda, asuntos indígenas, reconversión productiva, entre otros, ante el Poder Ejecutivo Estatal.

A nosotros no nos molesta que ustedes estén aquí, no quisiéramos que nadie tuviera que recurrir a esas incomodidades de la lucha, eso no es lo justo

les dijo la diputada Domínguez Nava.

Al concluir la sesión los trabajadores del campo, recogieron sus bártulos y abandonaron el Congreso del estado.