Culiacán, Sin.- Esta semana concluye el ciclo escolar 2022-2023, el tercer ciclo después de la pandemia por Covid-19 y el primero en desarrollarse 100 por ciento de manera presencial luego de la contingencia sanitaria, sin embargo son múltiples los problemas tanto de infraestructura y servicios básicos como de aprovechamiento académico que aún persisten en las escuelas.
Para atender las necesidades de infraestructura, el Gobierno del Estado y el Gobierno Federal han destinado cientos de millones de pesos para rehabilitar, reparar y construir áreas esenciales en planteles que reportaron daños durante la pandemia.
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Los recursos ejecutados desde el 2020 a través del Instituto Sinaloense de la Infraestructura Física Educativa (Isife) y el programa La Escuela es Nuestra no han sido suficientes, a la fecha aún se registran manifestaciones y cierres de escuelas en distintas comunidades debido a las condiciones de los centros educativos.
Aprendizaje
En cuanto al rendimiento escolar expertos señalan que son mínimas las acciones de las autoridades educativas por reducir la brecha que generó la pandemia, para la organización Mexicanos Primero pareciera que las autoridades y personal docente están enfocados solamente en implementar el nuevo modelo educativo llamado Nueva Escuela Mexicana sin antes atender las necesidades de aprendizaje.
El director general de Mexicanos Primero en Sinaloa, Gustavo Rojas Ayala afirma que es difícil la tarea de caminar hacia el futuro pretendiendo alcanzar nuevos aprendizajes sin antes atender las debilidades educativas de niñas y niños que dejaron las clases a distancia.
“Parece que la autoridad educativa tiene muchísimo más interés en prestar atención a lo que respecta a la implementación del próximo programa de estudio en vez de reconocer los efectos de la pandemia en el aprendizaje de niñas y niños”.
Para conocer los efectos en el aprendizaje es necesario realizar un diagnóstico integral como una mirada al interior del sistema educativo que refleje las necesidades, debilidades y áreas de oportunidad de cada plantel, así mismo es necesario trabajar en reforzar la comunicación y sana convivencia en la comunidad escolar.
“Creemos que es importante que las autoridades hagan un balance de cómo están los aprendizajes en todo el estado, sin esa información es difícil pensar en cómo es que estamos mejorando, ahí hay un gran punto de deuda en este ciclo escolar”.
“Lo que vemos es que lamentablemente no hay una estrategia integral de diagnóstico a todas las necesidades de las escuelas para responder a lo básico”.
Infraestructura
En cuanto a las necesidades físicas de los planteles, la Secretaría de Educación Pública y Cultura, Graciela Domínguez Nava afirma que solo hay 44 planteles con fallas en los servicios de energía eléctrica y aires acondicionados.
Presuntamente las altas temperaturas registradas en los últimos días habrían provocado una sobre carga en los sistemas de electricidad de estas escuelas, problemas que ya se están atendiendo y hay garantía para que el próximo ciclo esté resuelto el problema, según dijo la Secretaria de Educación.
“Estábamos con un diagnóstico de 44 escuelas que no tenían luz, ya estamos avanzando en todas en su atención, en el 50 por ciento hace dos semanas se iniciaron los trabajos y en el otro 50 estamos en ese proceso”, informó Graciela Domínguez Nava.
“El Gobernador del Estado ha reorientado recursos extraordinarios para que se garantice que todas las escuelas que tuvieron problemas de energía eléctrica al cierre de este ciclo escolar regresemos con las condiciones adecuadas de energía”.
La titular de la Secretaría de Educación también informó que con una inversión de 5 millones 600 mil pesos están dotando de impermeabilizante a más de 300 escuelas en toda la entidad, las escuelas beneficiadas son aquellas que no reciben apoyo del Fondo de Aportaciones Múltiples y que tampoco son parte del programa La Escuela es Nuestra.
200 millones para infraestructura
En diciembre del 2022 el Congreso del Estado aprobó el presupuesto de egresos para este año, el programa Escuelas de Tiempo Completo recibió un presupuesto de 200 millones de pesos, mismo que la Secretaría de Educación anunció que destinarían al programa La Escuela es Nuestra, en sustitución al extinto programa de tiempo completo.
A más de la mitad de este año la Secretaría de Educación no ha ejecutado los 200 millones de pesos, afirma que están en proceso de establecer las reglas de operación y aún no se sabe la cantidad de planteles que recibirán el recurso para atender problemas internos de infraestructura.
Con el tiempo encima surge la duda si este recurso lo alcanzarán a aplicar antes de que termine el 2023, aunque Graciela Domínguez afirma que se ejecutará en el mes de octubre.
“Estamos en ese proceso para que se aplique antes de que concluya el año en el mes de octubre”.
Brecha de desigualdad
Mientras tanto el especialista en temas de educación advierte que si no se toman acciones en cuanto al aprendizaje de las niñas y niños las consecuencias se verán reflejadas en un futuro próximo, en la calidad de los aprendizajes, en el desempeño de los egresados, en el campo laboral, en la economía y la calidad de vida.
“Si no resolvemos nos va a traer consecuencias en el aprendizaje pero también en la vida de niñas, niños y jóvenes, va afectar sus expectativas de ingreso, va a tener efecto a nivel de la economía, va a discriminar entre quienes sí tuvieron y quienes no tuvieron oportunidad de aprender en casa durante la pandemia y eso va generar más desigualdades”.
