Culiacán, Sin. - Ante la segunda inundación en menos de una semana, y con este problema por segundo año consecutivo, vecinos del populoso conjunto habitacional Infonavit Humaya de plano prefieren tener muebles de plástico, e incluso, hay una familia que decidió irse a vivir a otro lugar, pues “esto no tiene lucha”, claman.
El señor Álvaro Cortez, ya de edad avanzada, observa cómo los muebles de su casa son sacados para llevarlos a su nueva morada: Cedros. Pero aclara que su nueva casa está en la parte alta del sector, el cual también se inundó con las fuertes lluvias de la Depresión Tropical 19-E el año pasado.
Su casa en Infonavit Humaya está justo a un lado del canal que están profundizando y ampliando para incrementar la capacidad de arrastre de las aguas pluviales y con ello evitar nuevas inundaciones.
Con las dos lluvias de esta semana que han generado inundaciones no tan fuertes, el señor Álvaro señala la vivienda de enseguida, cuyos cimientos prácticamente ya están a la vista, “la señora (que habita dicha casa) está aterrada por la posibilidad de que se derrumbe”, comenta.
En otra vivienda de este sector vive la señora Flor Sánchez. Al pasar por enfrente, se puede observar que su sala está vacía. No hay sillones, pero sí cuatro sillas de plástico. “Ya pa’ qué comprar muebles, si se van a mojar y se van a echar a perder”, explica.
El piso de su vivienda está muy limpio, dice que ya lo lavó, igual que durante la anterior inundación de esta misma semana.
Como es mucha el agua que utiliza para lavar el piso y las paredes, solicita que la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de Culiacán (Japac) no les cobre toda esa agua, porque si están consumiendo no es por consumirla, sino que es obligado.
Durante estas dos últimas inundaciones, por lo menos 24 viviendas de este sector han resultado afectadas parcialmente.
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AMPLIACIÓN LLEGÓ TARDE
Los vecinos entrevistados en el sector culpan de estas inundaciones a los trabajos de ampliación del canal. Aclaran que no están en contra de esos trabajos, sino en contra de que la obra se haya iniciado prácticamente al inicio de la temporada de lluvias.
Si la hubieran empezado a inicios del año, estimaron, seguramente no hubiera habido inundaciones, porque la verdad es que no ha llovido tan fuerte.
Y es que las dos últimas inundaciones, según las mismas autoridades, fueron ocasionadas porque la basura y la tierra que sacaron para hacer la obra, fueron arrastradas por el agua y formaron un tapón en el canal que provocó el desbordamiento del agua.
Al tratar de entrevistar al encargado de la obra, quien vestía pantalones de mezclilla, camisa de manga larga y sombrero, atajó que él no daba entrevistas.
“Yo quiero que vengan los del Ejército. Ellos sí ayudan. Ustedes nomás llevan chismes”, masculló entre dientes y se alejó de los reporteros.
Déjalo, anda enojado, le explicó el reportero al fotógrafo. El residente de la obra, así se autodenominó, alcanzó a escuchar y respondió también entre dientes: “¡Y cómo no!”.
Mientras, los vecinos siguen con el temor de nuevas inundaciones.
24 casas del Infonavit Humaya sufrieron inundación parcial en las primeras lluvias que han caído en la ciudad.
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