En Sinaloa, los bajos salarios son una realidad que afecta a muchas familias, que ganan lo suficiente para subsistir, sobre todo porque los sueldos no se incrementan al mismo ritmo que los productos de la canasta básica o de servicios, que un segmento importante de personas han dejado de adquirir.
Como en el caso de Andrés, quien al igual que 1 millón 439 mil 374 sinaloenses -según datos del INEGI- trabaja 6 días a la semana para sustentar el hogar donde él, su esposa y dos hijos viven. Sale desde las 7:00 de la mañana de su casa para cumplir su jornada de 8 horas realizando trabajos de albañilería, plomería y otros, en donde le pagan apenas para mantener la economía del hogar.
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Él trabaja de manera formal, recibe las prestaciones de ley como el Seguro Social, Infonavit, entre otros. Sin embargo, siente que a veces su salario no le alcanza, aunque asegura no tener gastos en lujos o excesos y percibir un sueldo mayor al salario mínimo en México.
"Yo mensualmente gano aproximadamente 15 mil pesos, trabajo aquí en Culiacán, pero vivo en un rancho cerca de Imala, allá los salarios son muy bajos y por eso prefiero ir y venir. Mi esposa trabaja esporádicamente en el campo", comentó, pero aún así le es insuficiente.
Las ganancias
Según los datos de 2022 recopilados por el INEGI, el ingreso por trabajo promedio de las familias sinaloenses es de 45,756 pesos por trimestre, equivalente a 212.43 pesos diarios. Andrés gana 300 pesos más que el salario mínimo.
Pero no para todos los sinaloenses es igual, puesto que un millón 31,503 de sinaloenses ganan 36,110 pesos trimestrales.
La mayoría de trabajadores subordinados perciben cada uno 27,811 pesos por trimestre, y las ganancias bajan hasta $17,857 en las personas con discapacidad.
Los gastos
"Yo en lo que más gasto es en la comida", recordó Andrés, y esto está registrado estadísticamente. El 33.7% del gasto corriente de los hogares sinaloenses se va en Alimentos y bebidas, destinando aproximadamente $14,445 pesos trimestrales.
En Sinaloa, comprar alimentos puede salir barato o caro. En el informe más reciente de la PROFECO se registraron costos de la canasta básica más altos y también los más bajos, 1035.27 y $831.40 respectivamente.
Brecha Salarial
Esporádicamente, la esposa de Andrés tiene oportunidad de trabajar como las 35 millones 221 mil 314 madres que trabajan en México, pero llevar dinero a casa cuando se es mujer es más difícil según los datos del INEGI. En este sentido, las estadísticas exponen una brecha salarial de $12,228.
Mientras los hombres perciben 32,837 pesos trimestrales, las mujeres tienen ingresos de 20,609 pesos.
“Claro que esto afecta al momento de querer mantener un hogar. Sí es difícil cuando se subsiste en pareja, la cosa se complica para las madres solteras que tienen que pagar guarderías para trabajar y empeora en los casos en los que los padres no dan manutención”, considera Rocío Avendaño Gálvez, presidenta del colectivo feminista CMAS.
Falta de unión
Para Julio César Silvas Inzunza, presidente del Colectivo de Organizaciones y Empresarios (CORE 33), es indispensable cambiar la mentalidad de los patrones para poder obtener condiciones laborales que no permitan a los trabajadores vivir con seguridad económica.
Dijo que a veces cosas tan básicas como las prestaciones de ley no son otorgadas a los empleados. Destacando que de los 1 millón 439 mil 375 personas que trabajan en el estado, poco más de 744 mil cuentan con estos derechos, mientras que 444,312 no tienen Infonavit ni seguro social.
“Los patrones tienen que entender que si a los trabajadores les va bien, a la empresa también. A veces pequeñas medidas, como proporcionar apoyo en el transporte, pueden aliviar la carga de las familias y mejorar su bienestar”, comentó.
