Culiacán, Sin.- No es la primera vez que Claudia llega al pie del edificio de cinco pisos e instala su protesta. Esta vez, como en otras ocasiones, llegó a media mañana a la Fiscalía General del Estado y sin ninguna ayuda, sola con su coraje y su sed de justicia, colgó cuatro mantas reclamando que el responsable del asesinato de su hijo Irving, de 22 años, sea detenido.
Una de ellas, la última, llamó esta vez la atención: “Al asesino lo defienden Los Chapitos por eso el gobierno no detienen (sic) a nadie.”
En una ciudad donde el crimen organizado parece gobernar, esta declaración suena suicida. La gente lo sabe, y por eso varios vehículos se detienen a tomar fotografías a las mantas. Lo mismo hacen los agentes de una patrulla de la Policía Estatal Preventiva y hasta un elemento de Tránsito Municipal.
Desde enfrente, dos jóvenes en una camioneta Jeep Cherokee parecen vigilar, toman fotos con sus celulares, observan de qué va el asunto…
Cuando se le pregunta a Claudia si esta pancarta no le acarreará problemas, comienza a llorar, unas lágrimas solitarias que le hinchan los ojos rubios detrás de ese rostro poblado de pecas: “Estoy dispuesta a que me maten o a que me resuelvan las cosas”, declara.
Se dice cansada, arrasada. “Ya me quitaron una vez mi vida cuando me mataron a mi hijo, ya no me pueden hacer nada más”, sentencia.
Sin embargo, cuenta la historia de cómo su hijo Irving fue asesinado. Ocurrió el 16 de junio de 2017 cuando circulaba en un Nissan Versa por la colonia Chapultepec. El joven era conductor Uber y dejó a una novia embarazada. Ahora la niña va a cumplir 3 años y Claudia anhela conocerla.
Ella se fue después de que ocurrió todo.
Claudia
Señala que la Fiscalía, desde entonces, intentó esclarecer el caso presentando la versión de un asesino que ya estaba muerto. En el tropel de palabras, intenta explicar que ahora hay una orden de aprehensión contra un presunto responsable que ella no reconoce.
“Me quieren poner a otro asesino cuando yo ya he dicho quién es el responsable”, asegura. En las mantas señala al vicefiscal de la zona centro, Miguel Ángel Valdez Zazueta, al ministerio público de homicidios y a la Policía de Investigación de proteger al responsable del crimen.
Yo no vivo en La Primavera, Ni tengo familiares que me Apoyen, incluso mi padrastro les está ayudando a sus mentiras, van 3 años, 3 meses y 19 días.
Claudia
-¿Por qué los hijos del Chapo?
“El responsable que no quiere investigar la Fiscalía es amigo de ellos, es a la autoridad a quien deben preguntar”.
Puedes leer: Caso: Trejo Espinal, “El Borre”, ante la justicia después de un año
Claudia se quedó hasta la 1 de la tarde. Dice que su protesta solitaria continuará, porque lo único que exige, es que se haga justicia por su hijo Irving.
“De seguro van a decir que estoy loca, porque en Sinaloa a las madres que exigimos justicia por nuestros hijos asesinados o desaparecidos, siempre dicen lo mismo: Esta mujer está loca”.
Lee más aquí ⬇