Escuinapa, Sin. - Muchas son las historias de desamor que han tenido un desenlace trágico, por mencionar alguna, está la del corrido de Laurita Garza, famosa historia a nivel nacional e internacional en la cual una mujer terminó con la vida de su amado y la suya.

Escuinapa tiene también la leyenda de una dama que murió por amor hace 50 años, en el conocido barrio de Paredones, y entres los pobladores se cuenta la aparición de esta triste alma que pena por las calles sureñas.

De acuerdo a lo relatado por los pobladores adultos de este barrio, esta joven, quien se llamaba Katalina, vivía con su familia (padres) en una humilde vivienda junto al arroyo Buñigas.

Como toda mujer adolescente, se enamoró de un hombre profundamente, quien a la postre terminó por convertirse en un amor imposible y por quien se cuenta tomó la decisión de quitarse la vida.

Katalina llevaría en su vientre el producto aquel amor mal correspondido, el hombre que a pesar del embarazo, no se casó con ella, por lo que se tuvo que quedar en la casa de sus padres.

Se cuenta que un día, ya con aproximadamente ocho meses de embarazo, Katalina tomó una terrible decisión; triste por el desamor, estando en su casa, agarró un galón de gasolina que tenía su papá y bebió de esta, luego salió y junto al arroyo se bañó con la gasolina y se prendió fuego ella misma.

Pese al intento que su papá y otras personas por apagar las llamas, no lograron salvarla; el bebé le fue sustraído de emergencia por un médico, pero este tampoco pudo ser salvado.

Su familia, al vivir esta aterradora experiencia, al poco tiempo abandonó el municipio y jamás se volvió a saber de ellos.

En la actualidad, cuentan que el alma de esta mujer ronda por el barrio donde vivió, hay personas que dicen haberla visto que se introduce en una parcela de mango, pero al momento de seguirla, esta desaparece entre los árboles, irradiando una luz, como una bola de fuego.

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También, dicen que se introduce a las casas donde se tienen bebés recién nacidos, que cuida de ellos, como si fuera el hijo que falleció junto con ella.

Aunque hay personas que piden por el descanso de esta mujer, no han logrado que su alma se aleje de este barrio.

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