Culiacán, Sin.- La temporada otoño-invierno no sólo refleja el calor en retirada, sino también es un tiempo en que llegan más jornaleros agrícolas migrantes a los campos, pero también se ve trabajo infantil en las calles.
Este fenómeno social de migración es un arma de doble filo, pues si bien miles de familias del sur del país aprovechan para laborar en campos agrícolas o vender productos y artesanías en el estado, hay otras que pueden recaer en la explotación infantil.
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El Sol de Sinaloa realizó un recorrido en algunos cruceros de la ciudad, se constató que la actividad laboral no solo aumenta para los adultos, sino que también repuntan los casos de niños trabajadores, cobijados bajo el término de explotación laboral infantil.
Cruceros en Culiacán
Desde las 2 de la tarde, un grupo de por lo menos 3 menores que oscilan entre los 13 y 14 años de edad, se plantan debajo de un árbol en el crucero que se ubica entre el bulevar Enrique Sánchez Alonso y Enrique Félix Castro, del Desarrollo Urbano Tres Ríos.
La dinámica de los adolescentes: limpiar vidrios a los automovilistas que hacen alto en el semáforo, otros más piden apoyo, una moneda, lo que sea.
Los conductores entregan a cada uno, “cacharpas”, de 2 tres ó 10 pesos.
En otro cruce, de Madero y Obregón, se colocan dos menores de entre 10 y 11 años de edad, ellos van solos al crucero y venden chicles a los automovilistas. En ese mismo punto, también se colocan adultos mayores a vender empanadas, algunos colguijes para los autos y otros venden paquetes de frituras.
¿Qué hace el DIF?
Hasta el mes de mayo en el 2022, el Sistema DIF estatal, había detectado un predio de 400 menores víctimas del delito de explotación infantil en Culiacán.
Cinco meses después, ahora en octubre, las autoridades no han modificado esta cifra.
Esto porque no se ha realizado un nuevo censo, por lo que la presidenta del Sistema DIF Sinaloa, Eneyda Rocha Ruiz, asegura que actualmente trabajan en censar a menores para tener una estadística que ayude a aplicar los programas sociales.
En entrevista, Rocha Ruiz reconoce que la cifra de casos es alta, explica que los números aumentan en estos meses con la llegada de migrantes de otras entidades.
“Nosotros cada año hacemos censo, ahorita estamos realizando el censo, hay niños que van y vienen, se hace un programa con las familias, se visita a las familias y los últimos reportes que hemos tenido es que estos niños que se han visto últimamente no son de Sinaloa, son niños que vienen de Chiapas sobre todo, de Oaxaca que están, pero vienen por temporadas y se van”, explica la funcionaria.
Solo se concientiza
Sin embargo, más allá de que se trata de una situación punible, el DIF Sinaloa trabaja con el programa PANNASIR, un programa de atención que incluye becas para los niños y atención para familias marginadas.
Con esta política pública, dice, se le da seguimiento a la identificación de las familias de los menores y se busca la implementación de acciones para concientizar y reivindicarlos.
“Tenemos un programa que se llama Parasir que está en el estado y en cada uno de los municipios y con ello nosotros estamos coordinando”, explica.
En cuanto a los casos de explotación infantil que pertenecen a niños sinaloenses, el procedimiento se basa en identificar los hogares de los mejores y dialogar con los padres de familia.
Entre las opciones que se les ofrece son cursos y capacitación con instituciones como Icatsin, entre otras.
“Los niños que son de aquí, que identificamos que son de aquí de nosotros, a ellos sí los podemos tener identificados, tenemos ya registro, los atendemos y apoyamos a las familias”, puntualiza.
Exhibición de puntos
En el mes de mayo, el Ayuntamiento de Culiacán a través de instancias que buscan la Protección para Niñas, Niños y Adolescentes, implementó una campaña de visibilidad de puntos de explotación laboral infantil.
Autoridades en ese momento, identificaron al menos 18 cruceros en la ciudad, en los cuales los menores laboraban vendiendo dulces, ofertando productos u ofreciendo algún servicio como la limpieza de cristales. Sin embargo, hasta ahora solamente eso se aplicó, mientras esta nueva temporada de otoño-invierno se asoma a las calles de la capital.
No hay denuncias
La Fiscal General del Estado Sara Bruna Quiñonez Estrada, informó que sobre este delito, la Dependencia a su cargo, no ha recibido denuncia alguna, ya sea generada por la misma ciudadanía o proveniente de alguna institución gubernamental como lo es Sipina, Dif u otro.
"De momento no tenemos registro, y tampoco hemos recibido de ninguna institución", puntualizó.