Culiacán, Sin. Aun cuando pudieran parecer buenas, varias medidas del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, en la práctica están quedando muy cortas, tales como el presupuesto, el salario mínimo, el ataque a la corrupción y en las acciones implementadas para reducir el robo de gasolinas, señaló el presidente estatal del PRD, Audómar Ahumada Quintero.
En lo que se refiere al presupuesto federal, explicó, Sinaloa ha sido golpeado con una reducción de aproximadamente el 35 por ciento en lo que se requiere al financiamiento al campo, a pesar de la marcada importancia que tiene la entidad en producción de alimentos.
Es decir, dijo, si el 2018 fue un año complicado para el campo sinaloense, este 2019 será más complicado para los productores.
Ante ello, el dirigente estatal del PRD cuestionó los tan publicitados ahorros y la austeridad de que hace gala el Gobierno Federal, pues en los hechos están dejando sin recursos a las actividades primarias, donde la pobreza es manifiesta.
Audómar Ahumada le sumó a lo anterior el tema de salario, pues aseguró que las medidas aplicadas se han quedado muy cortas.
“En el 2019 se repite la pérdida del poder adquisitivo del trabajador; mientras algunos insumos, alimentos y artículos de primera necesidad aumentaron en 2018 más del 25 por ciento, el salario sólo aumentó el 16 por ciento”.
En el tema de corrupción, Audómar Ahumada cuestionó que el Gobierno Federal ha difundido con profusión que ha acentuado la lucha contra la corrupción, “pero no existe ni un corrupto en prisión que haya ingresado en los recientes meses.”
La gran interrogante en este rubro, dijo, es si ¿es posible atacar la corrupción haciendo a un lado la ley sin procesar a quienes la violaron?
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En que se refiere al robo de gasolinas, que se ha conceptualizado como “huachicoleo”, el presidente estatal del PRD reconoció que ya era necesario hacer algo al respecto, ya que a nivel nacional existen zonas donde el robo es grande, y el desabasto de gasolina también.
“Ciertamente era necesario hacer algo, pero también era justo que las acciones atacaran a quienes lo provocaran, sin causar retrasos o inconvenientes al ciudadano, quien finalmente es el consumidor”.
Lo que es de esperar, dijo, es que no se sigan cometiendo más errores logísticos y de estrategias, pues además el ciudadano seguirá pagando una de las gasolinas más caras del mundo.