Niño de diez años trabajó de halcón y ahora anda huyendo

Cientos de niños no festejarán su día porque a su corta edad se han convertido en hombrecitos

Irene Medrano Villanueva

  · lunes 29 de abril de 2019

Culiacán, Sin.-. “Mi hijo tiene nueve años y trabajaba como halcón. Yo no sabía que se dedicaba a eso; se iba a trabajar disque de limpiavidrios y le iba más o menos bien”, señaló Ernestina.

Ernestina es una joven mujer, madre soltera de dos menores, sólo que uno, a los nueve años torció el camino y ahora está escondido para evitar ser localizado “por los malandros”.

El papá de mis hijos, hace seis años, nos dijo ahorita vengo, voy a buscar chamba y nunca regresó, mi hijo sufrió mucho el abandono de su padre, se volvió rebelde, pero siempre con una ilusión: tener dinero, comprar aires acondicionados para no sufrir calores y buena ropa, zapatos.

Ernestina


Viven por la Loma de Rodriguera, con sacrificios sostiene a su familia conformada por su mamá un hermano que tiene síndrome de Down y sus dos hijos y a diario se levanta para irse a trabajar, su rutina es de sol a sol, aunque dice que el trabajo a ella no le pesa.

“Me pesa más no poder haber orientado a mi niño, lo miraba que no estaba conforme con la vida que llevábamos, al salir de la escuela, se iba que, a los cruceros a limpiar vidrios de los carros, empezó a llevar dinero que a mi entender no podía ganar con el trabajo que hacía. Me entró la duda de lo que hacía mijo, cuando venía un morro como de 14 años y se lo llevaba en una moto, yo no tenía tiempo de vigilarlo porque trabajo de sirvienta…”, comenta

Recuerda que un día llegó todo golpeado y por fin le confesó a lo que verdaderamente se ofrecía.

No tuvo más remedio que decirme a qué se dedicaba, soy halcón, ma, me dijo, con el dolor de mi corazón lo mandé lejos, con unos parientes para alejarlo de los malandros…Mi hijo no festejará este día, porque muy pronto dejó de ser niño para convertirse en hombre y ahora sufre las consecuencias. No estudia, trabaja en una maquiladora y lo peor es que está huyendo a sus diez años.

La madre.

De acuerdo al último censo del INEGI en Sinaloa viven 787 mil 536 niños y niñas de 0 a 14 años, que representan el 28% de una población de 2 millones 966 mil 321 habitantes.

Un dato preocupante es que de los cerca de 800 mil niños que hay en el estado, el 68.7% de esta población vive en hogares en donde la madre y el padre están presentes. Sin embargo, algunos niños no viven con el padre o la madre o viven sin el padre ni la madre, estas situaciones pueden indicar abandono y en consecuencia vulnerabilidad.

De la población de menores que forma parte de un hogar 19.4% vive sólo con la madre, los que viven sólo con el padre representan 1.6% y los que viven sin padre ni madre, 4.9 por ciento. El INEGI destaca que conforme los niños son de mayor edad, es más alto el porcentaje de los que no viven con la madre ni el padre y menor el porcentaje de los que viven con ambos padres.

En la entidad, de los menores de 18 años, 3.2% son huérfanos: 2.6 de padre, 0.5 de madre y 0.1% de padre y madre. Cabe señalar que los niños menores de 6 años presentan en menor proporción la condición de huérfanos en comparación con los de 6 a 11 años y de manera más marcada con respecto a los de 12 a 17 años de edad.

Yo no voy a festejar… tengo que trabajar para que mis hermanos coman. No tengo papá.

Mariano.

Mariano tiene 12 años, trabaja en el mercado de abastos “en lo que me cae” y se ha convertido en todo un hombrecito al hacer la función de padre de dos de sus hermanos de ocho y diez años de edad.

Cuenta que no recuerda a su madre porque los abandonó cuando su hermano menor tenía unos meses de nacido “se fue con otro hombre y dejó a mi apá, y hace dos años lo mataron, nos quedamos con mi abuela, ahora tengo que llevar dinero. Si logro juntar algo más a lo mejor les compro un pollito y… festejamos”, indicó.