Culiacán, Sin. -Los jueces que conforman los tribunales familiares de Sinaloa fueron intercambiados de sede en atención a quejas que la Federación de Abogados realizó al Supremo Tribunal de Justicia.

El presidente de la asociación, Julio Alvarado, comentó que todo empezó con encuestas que realizaron a los representantes legales, de tal suerte que los resultados arrojaron irregularidades por parte de los juzgadores.

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“Se quejaban mucho de la corrupción, cobro para entregar un oficio, por ejemplo; te lo condicionaban para que te lo entregaran dádivas en los juzgados, sobre todo en Los Mochis y Mazatlán, en Culiacán no tanto”, comentó.

Destacó que el cambio de juzgadores es una medida de amonestación, puesto a que ya estaba bien establecidos en su sede.

Si bien dijo que podría haber dilación en algunos asuntos, comentó que es cuestión de tiempo para que todo corra con normalidad.

Explicó que es importante hacer visible estas problemáticas, porque la clase de actos denunciados por los abogados obstruyen el acceso a la justicia para los ciudadanos.