Culiacán, Sin.- ¡Qué tiene en la cabeza el gobernador! exclamó el alcalde de Culiacán, al referirse que Rubén Rocha Moya se pronunció en contra del aumento del cinco por ciento al Predial Urbano, además Estrada Ferreiro demandó a los legisladores que se dejen de andar en campaña y se pongan a trabajar.

“Lo malo es que el gobernador declaró públicamente que él ni el 5 por ciento estaba de acuerdo, o sea, qué tiene en el cabeza, no entiendo por qué hace ese tipo de declaraciones, son absurdas, son declaraciones que dañan al pueblo, están traicionando al pueblo”, dijo.

Desde temprano, seguidores del alcalde, en su mayoría trabajadores del ayuntamiento, se apostaron en las instalaciones del Congreso para apoyar el incremento del 6 por ciento que propone el presidente municipal de Culiacán.

Los trabajadores llegaron solamente al estacionamiento ya que se les prohibió la entrada, a lo que el diputado de Morena, Serapio Vargas Ramírez, se pronunció en contra de que no se deje pasar a la casa del pueblo.

“No sé a qué le temen los diputados. Desde cuando debería de haberse derrumbado esas rejas; fue para evitar las protestas. Yo ya entré, entonces ahora para que quieren mantener las bardas”, dijo.

Obligan a trabajadores del ayuntamiento a manifestarse

También se pronunció en contra de que el alcalde Jesús Estrada Ferreira haya amenzado a trabajadores que no quisieran asistir a la protesta en el Congreso: “me lo han manifestado algunos trabajadores y eso no se vale”, sentenció.

Algunos trabajadores se manifestaron en contra de que no se les permitiera entrar “al corralito donde hay todo tipo de animalitos: gallinas, gatos y otros animalitos”, dijo Juan Bastidas.

Lamentaron que ya se está haciendo costumbre de que no se permita entrar al Congreso, pese a que en tribuna, siempre se dice que es la casa del pueblo.

“Siempre dicen que primero los pobres y los pobres son los que menos tienen derecho a protestar como es el caso, donde se está apoyando a los ricos y a los pobres otra vez nos sacrifican con el pago del predial”, aseguraron.

El alcalde si logró ingresar al salón Constituyentes para poder participar posteriormente en la sesión a la hora de que se daba lectura al dictamen que establece los valores unitarios del suelo y las construcciones del municipio.

Poco antes, en conferencia de prensa dijo que el seis por ciento impactaría con 60 pesos al año a cada contribuyente de clase media, pero serán cientos de millones de pesos que se van a ahorrar los grandes contribuyentes, lo que va a perjudicar a la administración porque no habrá dinero para hacer obras ni para prestar los servicios públicos.

Aseguró que con el incremento que pretende autorizar el Congreso del Estado de entre el 2.5 y 4 por ciento al impuesto predial urbano se busca beneficiar como siempre a los grandes empresarios de Culiacán, a los ricos y poderosos, a los que le pagan a los diputados.

Estrada Ferreiro acusó que las y los legisladores están pensando nada más en el político ya que la vez pasada fue por la gubernatura y ahora por la senaduría.

Voy a quitar descuentos: Estrada

El alcalde de Culiacán amenazó diciendo que, si el Congreso del Estado autoriza el incremento que propone de entre el 2.5 y 4 por ciento al predial, suspenderá los descuentos en este gravamen a partir de enero empezando con los comerciantes e industriales.

Por su parte la diputada de Morena Cecilia Covarrubias, en tribuna en el momento que se pusieron a consideración las tablas catastrales de ocho municipios, entre ellos, el de Culiacán, prácticamente le contestó al alcalde de Culiacán al advertir que afuera del recinto parlamentario hay tres millones de sinaloenses que no sabe lo que está pasando en el tema del predial.

“40 diputados arrastramos el lápiz, confrontamos ideas para que no haya aumento. El 80 por ciento son los que pagan y son los que menos tienen. El 20 por ciento restante son los más ingresos tienen y que casualmente los que menos pagan impuestos, por eso son los que más van a pagar”, aseguró.

Sin embargo dijo que los legisladores están siendo considerados con los ricos, al pagar del 3.5 al cuatro por ciento.

“Estamos respondiendo con sentido social, porque amor con amor se pagan… primero los pobres”, concluyó.

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