Culiacán, Sin.-Durante una semana, las calles de la capital del estado quedaron sin policías municipales y agentes de Tránsito, luego de que la Secretaría de la Defensa Nacional asegurara que revisaría la licencia de las armas de cargo, aunque para algunas voces de la sociedad civil, esta demora resulta “sospechosa”.
Y es que de acuerdo con una encuesta del INEGI, en Sinaloa el 86 por ciento de los ciudadanos consideran a los policías sinaloenses como deshonestos, lo que contrasta con el alto nivel de aprobación que tienen los policías en sus controles de confianza, modificados en 2021 ante el gran número de reprobados. Actualmente pasan 8 de cada 10 policías estos exámenes practicados por lo menos una vez al año.
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Durante la semana sin policías, se desató una oleada de robos y vandalismo en el Centro de Culiacán, así como en otros lugares, en donde el despojo de unidades aumentó de manera considerable.
Mientras tanto, el jueves 3 de octubre, el alcalde Juan de Dios Gámez anunció que los policías volverían a las calles, pero estarán acompañados por los Policías Estatales para la vigilancia del municipio, sin portar sus armas de cargo, que al cierre de la semana seguían supuestamente bajo revisión militar.
Pruebas fáciles
Los exámenes de control y confianza que se aplican a los policías sufrieron modificaciones en 2021, en la última fase del Gobierno de Quirino Ordaz Coppel, debido a los bajos índices de aptitud que arrojaban las pruebas a las cuales se sometía a los agentes.
Entre los análisis clave de estos exámenes se encuentran que el agente no conozca a personas de la delincuencia organizada y que su forma de vida empate con sus sueldos.
Nada más en el año 2017 el Centro Estatal de Evaluación registró que el 49% de los policías, estatales y de las corporaciones de los 18 municipios, no eran aptos para su trabajo, pero no hubo despedidos ni depuración. Dicho porcentaje contrasta notoriamente en general, con los resultados obtenidos después de las modificaciones a los exámenes.
Para 2021, cuando se realizaron las modificaciones para mejorar los resultados, el porcentaje de reprobados era del 23%, y para 2024 se redujo hasta un 2%, según documentos consultados en el portal del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
A pesar de que las modificaciones causaron que la mayoría de los policías aprobaran, la ciudadanía sigue percibiendo a las autoridades locales como corruptas.
Continúa la corrupción
En el territorio residen 1.1 millones de habitantes, de los cuales el 67.9% identifica la inseguridad como el mayor problema de la entidad; le sigue la corrupción con un 60%.
Del 2021 al 2023, las estadísticas del INEGI muestran una reducción ínfima, ya que en el primer periodo mencionado, la frecuencia de corrupción identificada por los residentes era del 87.5%, y se redujo solo en 1.1% en dos años.
En contraste, las últimas encuestas revelan que el 40.5% de los pobladores confían en los policías. Esta cifra se ve opacada por la tranquilidad que el Ejército y la Marina brindan a los ciudadanos. En la última encuesta del Instituto, resultó que el 74.5% de los sinaloenses confían en estas autoridades federales.
Revisión exhaustiva
El 25 de septiembre comenzó el desarme de los policías municipales de Culiacán, en el marco del conflicto entre las dos fracciones del Cártel de Sinaloa: Los Chapitos y La Mayiza. Los agentes fueron primeramente acuartelados y solamente personal administrativo continuó laborando en las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal.
La SEDENA comunicó que se trataba de una revisión de los permisos de portación de armas, afirmando que se trata de una actividad rutinaria que se realiza en todas las policías.
Paralelo a esto, las Fuerzas Armadas descubrieron varias unidades de la Policía Municipal clonadas, lo que también detonó las alarmas por la forma en que los delincuentes usan este tipo de unidades apócrifas para hacer pasar por agentes oficiales.
Sin embargo, la revisión de las armas se extendió por más tiempo del esperado, lo que afectó al sector comercial, ya que los delincuentes aprovecharon la ausencia de los uniformados para robar en locales.
La Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) reportó un repunte del 20% en este tipo de ilícitos. El mes patrio culminó con un total de 162 denuncias de robos a comercios presentadas formalmente ante la Fiscalía General del Estado.
Salen desarmados
Ante la exigencia de los comerciantes para que los policías regresaran, el Gobierno del Estado y el municipio lanzaron un operativo conjunto el 2 de octubre para patrullar el centro de la capital y con esto mitigar la incidencia de robos a comercios.
Sin embargo, los agentes municipales que participaron no portaban armas, aunque esto fue interpretado por el coordinador del Consejo Estatal de Seguridad Pública como una oportunidad para mejorar la relación con la ciudadanía.
Se levantan sospechas
A pesar de que el desarme de los policías se presenta como una inspección rutinaria, la demora para permitir que la corporación continúe con su labor ha causado sospechas de irregularidades dentro de la paramunicipal.
Según Miguel Calderón Quevedo, coordinador del CESP, el tiempo que le ha tomado a la SEDENA realizar la revisión es sospechoso, comparándolo con actos similares que se realizan en un solo día.
“Obviamente hay más policías en Culiacán, pero aun así, la tardanza nos dice que hay irregularidades encontradas. Al menos esa es la sospecha porque seguimos a la espera de que nos den un reporte oficial”.