Culiacán, Sin.- En los últimos años en Sinaloa el desplazamiento forzado interno se ha recrudecido, actualmente hay más de 3 mil 300 personas víctimas de este desplazamiento, informó la Secretaria de Bienestar y Desarrollo Sustentable, María Inés Pérez Corral.

El desplazamiento forzado se ha registrado principalmente en la zona serrana del estado, en los municipios de Choix, Sinaloa, Guasave, Concordia, Cosalá y Culiacán, son 3 mil 316 personas registradas en el censo de la Sebides, quienes solicitan acceso a la vivienda y restitución de sus derechos.

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El grueso de las víctimas de desplazamiento forzado interno se encuentran en asentamientos irregulares ubicados en colonias y comunidades de los municipios de Culiacán, Mazatlán, Concordia, Guasave, Guamúchil, Sinaloa y Choix, informó la titular de Sebides.

“Teníamos 3 mil 16, ya aumentó a 3 mil 316 personas. Nosotros empezamos a trabajar porque la constitución así lo marca, había que restablecerle sus derechos”, señaló Pérez Corral.

Actualmente la Secretaría de Bienestar y Desarrollo Sustentable trabaja en la adquisición y acondicionamiento de terrenos, así como en la entrega de solares para construcción y títulos de propiedad a las familias desplazadas.

“Ahorita ya hubo entregas, asignaciones en los municipios receptores, ya están muchos de los servicios y ya se les entregó lotes a muchas de las familias desplazadas”, detalló la funcionaria.

“Repartimos tanto el Guasave como en Sinaloa, en Concordia y aquí (Culiacán) se están metiendo los servicios, no había asignaciones y se empezaron a asignar”.

Del presupuesto para atención a desplazados del año anterior, de 60 millones de pesos, la secretaría destinó poco más de 40 millones de pesos para acondicionar los terrenos, habilitarlos con servicios básicos de red de agua potable, drenaje y energía eléctrica.

“El año pasado fueron 60 millones y se dieron 40 millones para acciones técnicas de reparación de terrenos y vivienda, construcción de plataformas, redes de inducción de servicios de drenaje, alcantarillado, agua potable, se compraron predios por un valor de 11 millones y el software de registro con valor de 800 mil pesos, también se metió energía eléctrica con valor de 5 millones en el Cvive Mazatlán”, informó María Inés Pérez Corral.