Agosto arrancó con el aumento incesante de los homicidios dolosos, nada más durante la primera semana del mes, se registraron 20 asesinatos en todo el estado, lo que representó 3 muertos al día.
Entre la escalada violenta se registró en las afueras de Mazatlán el enfrentamiento que terminó con la vida de Jorge Raúl, “El R-18”, presunto operador del Cártel de Sinaloa en Colima.
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La segunda semana fue marcada por la reacción del gobierno federal, al lanzar un operativo militar en la capital del estado que concluyó con el arresto de Humberto Arredondo Soto y César Tapia Quintero, hermano de José Guadalupe, “El Lupe” Tapia, quien hasta antes de su arresto era encargado de coordinar laboratorios de drogas para la facción de Ismael “El Mayo” Zambada.
De acuerdo con información recolectada, el primer operativo fue desplegado el martes 8 de agosto en la colonia Revolución, sobre el bulevar Agricultores. Allí detectaron a sujetos armados y en una rápida persecución, una patrulla militar sufrió un accidente.
En el interior del domicilio encontraron a César Tapia, de 56 años, acompañado de otros dos sujetos. Al mismo tiempo en que se desarrollaba el cateo en la Revolución, también las fuerzas armadas se desplegaron en la colonia Sinaloa, donde revisaron un inmueble.
Paralelo a esto, al puerto de Mazatlán arribaron 300 elementos del Ejército y la Guardia Nacional, los cuales se han visto patrullar, aunque al amanecer del viernes 11 de agosto, fueron arrojados los cuerpos de dos hombres por la carretera México-15, a la altura del municipio de Elota.
Facción Zambada
Según fuentes de seguridad, los últimos golpes han sido en contra de la facción Zambada, ya que el “El R-18” era considerado brazo armado del grupo de “El Mayo”.
“El R-18” había sido detenido en Jalisco en 2018 con armas, pero en 2022 obtuvo su libertad en un proceso judicial poco conocido, según la Fiscalía General del Estado, contaba con domicilio en Mazatlán, desde donde dirigía las actividades criminales.
La noche del domingo 6 de agosto en que fue emboscado cuando circulaba sobre la México-15, a la altura del Chilillo y de El Habal, Jorge Raúl iba con dos escoltas que murieron y una mujer de 19 años que se identificó como su pareja. Al cierre de edición, su familia no había reclamado su cuerpo ante el forense.
También el arresto de César Tapia y de Humberto Arredondo Soto, señalado por la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) como líder de célula criminal, fueron un impacto a la estructura de esta facción de la organización criminal sinaloense.
César fue detenido justo seis meses después de que el Ejército lanzara un operativo con un helicóptero artillado en la sindicatura de Tacuichamona, el 9 de febrero pasado. A ambos hermanos Tapia se les vinculó con la producción y trasiego de metanfetamina y fentanilo.
En marzo, una hermana de ambos, Alma Nidia, fue elegida en votación como síndica de esa sindicatura del sur del municipio, impulsada por Morena.
En cambio, de Humberto Arredondo poco se sabía. Fuentes de seguridad indicaron que Humberto cuenta con antecedentes en Estados Unidos, en donde fue detenido y procesado, pero logró su libertad.
Actualmente es requerido por la Corte Federal del Oeste de Pensilvania, acusado de importar narcóticos sintéticos. Además, enfrenta otros procesos en Estados Unidos por los delitos de usar comunicaciones electrónicas para una transacción de drogas, posesión de drogas peligrosas y posesión de drogas para la venta, transporte de drogas y posesión de estupefacientes.
Fichados
El asesinato de “El R-18”, considerado jefe de la plaza de Colima, se emparejó con el fichaje que hizo el Departamento del Tesoro de Rafael Guadalupe Félix Núñez, “El Changuito Ántrax”, a quien se le acusa de estar encargado del trasiego de precursores químicos teniendo como base el puerto de Manzanillo, Colima.
En el comunicado de la Oficina para el Control de Bienes Extranjeros (OFAC), también se incluyó a los hermanos Alfonso y René Arzate García, “El Aquiles” y “La Rana”, también vinculados a la organización Zambada.
La OFAC señaló que estos tres hombres son clave en la distribución de sustancias para la confección de metanfetamina y fentanilo, cuyos cargamentos llegan a Colima y luego son distribuidos a Sinaloa, Sonora y Baja California.
Fuego a la lumbre
Todos estos movimientos de fichas llegaron en medio del aumento de la violencia en el estado. Hasta el 31 de julio se registraron 339 homicidios dolosos según cifras de la Fiscalía, y en este mismo periodo de 2022, sumaron 296, lo que representa un aumento del 14.56 por ciento.
En cuanto a desapariciones, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública reportó en los 7 meses de 2023 un total de 609 denuncias ante la Fiscalía General del Estado, un promedio de 2.8 personas al día.