Urge rehabilitación de las escuelas para disminuir rezago educativo

Las condiciones mínimas para que las instituciones educativas regresen a las clases presenciales son, contar con energía eléctrica y agua

Sandra Solís | El Sol de Sinaloa

  · jueves 28 de octubre de 2021

Urgente la rehabilitación de las escuelas para disminuir rezago educativo.

Culiacán, Sin.- La rehabilitación de las escuelas que por diversas razones tienen daños en su infraestructura debe ser prioridad para la nueva administración estatal, al ser necesario el regreso a clases presenciales por el rezago educativo que muestran algunos estudiantes, indicó, Gabriela Espinoza Valenzuela.

La directora general de Pro-educa Sinaloa IAP señaló que se tienen que aplicar políticas públicas que integren gobierno, sociedad civil y cámaras empresariales para que las escuelas estén en óptimas condiciones para recibir a los estudiantes y personal educativo.

Destacó que, aunque Sepyc ya cuenta con una plataforma para que los directores reporten los problemas de sus planteles educativos, se requiere un recuento directo de cada una de las escuelas para la creación de una política pública que atienda el problema real.

"Yo creo que sí es un reto mayúsculo, va a ser un reto mayúsculo, pero yo no dudo que lleguen con todo el ánimo de querer poner todos los kilos a resolver la situación", declaró.

Espinoza Valenzuela precisó que las condiciones mínimas para que más instituciones educativas regresen a las clases presenciales son: contar con energía eléctrica, agua, baños en buenas condiciones y ventilación en los salones.

"La ventilación cruzada, el tema de la ventilación, tener abiertas las ventanas, es muy importante para minimizar los contagios en las aulas, las escuelas con las que nosotros trabajamos se lo decimos", comentó.

La directora general de Pro-educa Sinaloa explicó que en Sinaloa se puede replicar el modelo de rehabilitación que se está aplicando en Nuevo León, en la que participan gobierno, cámaras empresariales y sociedad.

En este caso, las empresas donan materiales, pinturas, impermeabilizantes, baños, entre otras cosas, mientras que las asociaciones civiles vigilan la transparencia y el gobierno ejecuta las medidas.



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