El presidente de la República Andrés Manuel López Obrador invertirá 922 mil 678 millones de pesos para financiar sus promesas de campaña, es decir, casi un billón y el 15 por ciento del Presupuesto de Egresos Federales 2019.
López Obrador aseguró que alcanzará a financiar cada uno de los proyectos estratégicos de su sexenio con los fondos que se obtengan del combate a la corrupción y las políticas de austeridad, sin embargo, sólo se obtuvieron 16 mil 756 millones 759 mil 635 pesos de los recortes presupuestales.
Aunque invertirá 901.8 millones de pesos para apoyar a los Órganos Internos de Control de la Secretaría de la Función Pública, encargados de prevenir delitos de corrupción en la Administración Pública Federal, cabe recordar que recortó 5 mil millones de pesos al Sistema Nacional Anticorrupción.
Los proyectos favoritos del tabasqueño son los programas sociales, entre los que destacan la federalización del Sistema de Salud con 600 mil millones de pesos, las pensiones universales para los adultos mayores con 100 mil millones de pesos y Jóvenes Construyendo el Futuro con 44.3 millones de pesos.
De ahí, dará prioridad a todas las obras de infraestructura ferroviaria y carretera, las cuales tendrán una inversión pública conjunta de 12 mil millones de pesos, sin mencionar que la mayoría forman parte de los proyectos estratégicos para impulsar el desarrollo en la zona sureste del país, y sólo dos contemplan el norte y centro de México.
El tren Maya recibirá un fondo inicial de 6 mil millones de pesos y otros 850 millones para los trenes de carga del Istmo de Tehuantepec, mientras que el tren eléctrico urbano de Guadalajara y los vagones de la línea del metro de Nuevo León, obtendrán mil millones y 250 millones de pesos, respectivamente.
En la zona metropolitana invertirá 3 mil millones de pesos del erario público para terminar el Tren Interurbano México-Toluca y destinará 1.5 mil millones de pesos para la ampliación de la la línea 9 del metro en la Ciudad de México, dentro del tramo Tacubaya-Observatorio.
Además otorgará a las empresas paraestatales Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad, 60.5 mil millones de pesos y 16.5 mil millones de pesos, para que arranquen con los planes nacionales de refinería, producción de hidrocarburos y rehabilitación de plantas hidroeléctricas.
Otro de los rubros a destacar es el de seguridad y su promesa de no escatimar en gastos para encontrar a los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa a través de la Comisión de la Verdad, la cual recibirá 400.8 millones de pesos.
Además, invertirá 2 mil millones de pesos para la modernización de la industria militar en Puebla, estado al que mudarán la antigua fábrica de armas de la Secretaría de la Defensa Nacional, la cual se encontraba en un terreno de 150 hectáreas de Santa Fe, mismo en el que construirán complejos departamentales para rentarlos y así, financiar los 80 cuarteles militares de la Guardia Nacional.
La industria ganadera tendrá una inversión máxima de 20 mil millones de pesos, pues tan sólo para los precios de garantía en el pago maíz, frijol, trigo y arroz, el gobierno federal destinará 9 mil millones de pesos.
Las tiendas de Seguridad Alimentaria Mexicana, por las que se fusionan Liconsa y Diconsa, recibirán 6 mil millones de pesos, los créditos ganaderos a la palabra obtendrán 4 mil millones y destinarán mil millones de pesos para abastecer de fertilizantes de calidad a los campesinos de escasos recursos.