Culiacán, Sin.- En un lapso de menos de 24 horas, en la zona centro del estado fueron abandonados los cuerpos de 10 personas, de las cuales al menos cuatro, podrían estar relacionadas con el “levantón” masivo de casi 100 personas ocurrido entre el 22 y 23 de marzo pasado, y que el gobierno federal atribuyó al Cártel de Sinaloa.
Los primeros cuatro cadáveres fueron encontrados en las inmediaciones de la comunidad Los Arredondo, municipio de Navolato, apilados uno sobre otro, con marcas fuertes de tortura, cinchos en sus cuellos y con las manos cercenadas.
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En el servicio médico forense, familiares identificaron a las víctimas como Jorge Alfredo, con domicilio en la sindicatura de Imala (Culiacán) y quien fue privado de la libertad en el fraccionamiento Los Ángeles el 22 de marzo en que grupos armados se llevaron a un centenar de personas, entre adultos, niños y personas de la tercera edad, de los cuales la mayoría fueron liberados.
Otros dos fueron identificados como los hermanos Elisandro Adinael y Félix Aaron, ambos originarios de la sindicatura de San Javier, municipio de Badiraguato. El cuarto se llamaba Baldomero N.
Los cuatro aparecieron alrededor de las 3:45 de la tarde del domingo pasado en un terreno de cultivo, a un lado de un canal de riego agrícola. Posteriormente, se reportó que dejaron abandonados los cuerpos de tres personas sobre la carretera Elota-Cosalá, a la altura de la comunidad de La Papalota.
Sin embargo, al arribar elementos de la Policía Municipal durante la noche no los encontraron. Fue durante la mañana de este lunes 1 de julio en que confirmaron el hallazgo de las tres víctimas kilómetros arriba, en Conitaca, en los límites de Elota y Cosala. Al igual que los cuerpos de Navolato, los tres también tenían las manos mutiladas.
La Fiscalía General del Estado informó que investigan si se trata de una familia de una mujer, el padre y su hijo también desaparecidos desde el viernes 22 de marzo durante el “levantón” masivo.
Conexiones
Al respecto de estas siete víctimas, la fiscal general, Sara Bruna Quiñónez Estrada, indicó que estos crímenes pudieran tener relación.
“Quizá pertenecían a la misma organización (delictiva) o tenían un enemigo en común, no se me ocurre otra cosa”, consideró.
En efecto, confirmó que las siete personas ultimadas presentaban similares huellas de tortura y las manos cortadas, dejadas a un lado de los cuerpos.
Sobre el caso, el gobernador Rubén Rocha Moya se limitó a declara que se le dará “tratamiento especial” a este caso, pero refirió que este 2024 ha sido el año menos violento en Sinaloa de los últimos 15 años.
Aparecen otros tres
En forma separada, mientras Rocha y Sara Bruna declaraban a los medios, las corporaciones confirmaron el hallazgo de otras tres personas, en dos hechos diferentes.
Un cuerpo fue encontrado por una brecha cercana al fraccionamiento Zona Dorada, al norte de la capital del estado, y dos más a un lado de la carretera que conecta la sindicatura de Imala con la presa Sanalona, también al norte del municipio.
De estos tres, las autoridades no contaban con identificaciones, pero se traba de hombres jóvenes entre 25 y 30 años de edad, que presentaban disparos en diferentes partes del cuerpo.
Ataque a una ambulancia
Una ambulancia del Hospital Integral de Tamazula, Durango, fue atacada a balazos cuando trasladaba a un herido de bala hacia Culiacán.
En la agresión también resultó lesionado de bala el operador de la ambulancia y el camillero salió ileso.
Elementos de la Cruz Roja de esta ciudad se trasladaron a la zona del ataque para transportar a los heridos.
