Culiacán, Sin.- Una niña de 8 años sufrió quemaduras de segundo grado al caerle agua hirviendo cuando se encontraba sola en su domicilio luego de que sus padres salieron a trabajar.
En un comunicado, la Policía Municipal informó que primero recibieron una llamada al Centro de Reacción Inmediata.
"Buenos días, ¿cuál es su emergencia?" -preguntó la Radio Operadora del servicio de emergencias 911.
De inmediato, se informó que una niña necesitaba ayuda, ya que estaba encerrada con llave y se había quemado con agua hirviendo con la que quería preparar chocolate.
De inmediato, un policía a bordo de una patrulla cercana al sector sur de la ciudad dijo: ¡próximo a la ubicación!
Al llegar, de un salto descendieron de la patrulla, el llanto de la pequeña mantenía a los vecinos en estado de incertidumbre, habían intentado entrar, pero la reja principal lo impedía.
Mientras los policías buscaban los medios para abrir la chapa, una vecina les comentaba que adentro con los pequeños se encontraba un jovencito a quien le pidieron entrara por la parte de atrás y él intentaba auxiliarla, entró, pero ya no pudo salir.
Los policías tomaron un marro y empuñándolo fuertemente golpearon a la chapa para lograr sacar a la pequeña.
El jovencito la tomó en brazos a la niña y la subió en la patrulla para trasladarla de inmediato al hospital.
“No podíamos oírla sufrir, podrán decir algunos que no es correcto que tumbáramos la chapa, pero es la vida de una niña, no importa cómo, hay que ayudarla; si hay que pagar la chapa, pues la pagamos, cuánto puede ser que valga más que la vida de ella”, expresó el oficial.
Metros adelante una ambulancia de Cruz Roja interceptó la patrulla y trasladaron a la pequeña a recibir la atención médica.
Sobre los menores, se dio vista a la Procuraduría de la Defensa del Menor en el Municipio, donde se dará el seguimiento correspondiente al caso.
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