TAPACHULA.- Los cerca de nueve mil centroamericanos que continúan varados en Tapachula, Chiapas enfrentan un creciente rechazo y falta de apoyo por parte de los ciudadanos y empresarios, debido a la falta de seguridad y bajas ventas, que según afirma la IP, ocasionan con su presencia.
Pese a contar ya con sus Tarjetas de Visitante por Razones Humanitarias, y a diferencia de las caravanas que llegaron en octubre y noviembre de 2018, el actual contingente de migrantes estacionado en el municipio fronterizo de Chiapas encuentra menos lugares donde alimentarse o refugiarse debido a que cada vez son menos los voluntarios y organizaciones que les ofrecen apoyo.
Entre los poco más de nueve mil migrantes que se encuentran varados entre Ciudad Hidalgo y Tapachula, hay quienes aseguran que permanecerán en el estado por tiempo indefinido a la espera de que se forme una caravana mas numerosa para cruzar México rumbo a Estados Unidos.
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Sin embargo, hay otro grupo que ya se alista para salir de Chiapas con rumbo al norte. Se espera que sean tres mil migrantes los que se enfilen a partir de hoy en busca del sueño americano.
Esta situación ha provocado malestar entre los negocios asociados al Foro de Organizaciones de la Región Soconusco, quienes en una carta dirigida al alcalde de Tapachula, Óscar Gurria Penagos, manifestaron su preocupación por la presencia de las caravanas, ya que conllevan inseguridad, violencia, alertas sanitarias, violación al estado de derecho y a las leyes mexicanas, por lo que pidieron retirarlos del parque y centro histórico.
Comerciantes y empresarios señalan que los migrantes asentados en el parque piden dinero a los peatones o se dedican al trabajo sexual irregular, situación que incomoda a los compradores, ya sea nacionales o extranjeros, los cuales han dejado de visitar el centro de la ciudad.
El vicepresidente de Coparmex en la Costa de Chiapas, Jorge Alfredo Gálvez Sánchez, acusó que diariamente, dos mil 500 a tres mil guatemaltecos llegaban a Tapachula a realizar compras, cifra que cayó casi 80 por ciento por la incomodidad que generan los cientos de migrantes en la ciudad.
De la misma manera, los habitantes del centro histórico de Tapachula han mostrado su rechazo a los centroamericanos y piden que sean removidos por diversas faltas. La Secretaría de Seguridad Pública Municipal señala que los ciudadanos han reportado numerosas faltas administrativas que han cometido los migrantes, que van desde escandalizar en la vía pública, ingerir bebidas alcohólicas en la calle y dejar basura, por mencionar algunas.
Cabe recordar que una parte de este grupo de migrantes fue expulsada de manera violenta por habitantes del parque central de Ayutla, en Guatemala, debido a las mismas molestias que reportan los chiapanecos.
La madrugada del 28 de enero, con palos y piedras los guatemaltecos persiguieron a los centroamericanos hasta el puente internacional que conecta a Tecún Umán con Suchiate, en donde se refugiaron a la espera de que las autoridades mexicanas les otorgaran visas humanitarias.
LOS CONTRATAN PARA LOS CAMPOS AGRÍCOLAS
Por otro lado, frente al puerto fronterizo, una empresa se dedica a contratar a los migrantes con la tarjeta de visitantes por razones humanitarias, para que trabajen en el levantamiento de cosechas en Sonora, Sinaloa y Jalisco.
Las empresas grupo Molina y Bioparques de Occidente contrataron a unas 150 personas para sus campos agrícolas.